Más de 1.000 jóvenes asturianos dieron positivo en el cribado organizado por el Principado. Exactamente 1.058. Desde que Salud tomase la decisión de hacer pruebas masivas a los menores de 30 años, a principios de mes, se han efectuado más de 6.300, de las que el 16,7% fueron positivas, tal y como ha podido saber este periódico. Estos datos son fiel reflejo de la alta positividad que está dejando esta quinta ola en Asturias, al nivel de los momentos más duros de la pandemia. Eso sí, con una menor incidencia hospitalaria. Pese a ello, el Principado ya ha preparado un plan de contingencia que permita afrontar con garantías todo lo que pueda venir: se han habilitado más de 130 camas para pacientes covid, se ha reforzado la plantilla de rastreadores y también se han contratado auxiliares administrativos para agilizar los trámites en los centros de salud.
Salud tomó la decisión de hacer un cribado a los menores de 30 años a principios de julio. Fue apenas unos días después de que se fraguase la tormenta perfecta que desencadenó la quinta ola: fin de exámenes y cursos académicos, viajes de estudiantes, fiestas de graduación, relajación en el uso de la mascarilla, reapertura del ocio nocturno, partidos de la Eurocopa... Todo ello formó un cóctel que muchos jóvenes se bebieron de un trago. ¿El resultado? Cifras de incidencia acumulada y curvas de contagio prácticamente idénticas a las de las dos primeras olas de la pandemia, que alcanzaban cotas nunca vistas en el caso concreto de los jóvenes. Las buenas noticias eran que al tratarse de menores de 30 años, el porcentaje de positivos que acababan hospitalizados era -y es- mínimo.
Organizar el muestreo masivo fue la primera decisión tomada por el Principado para tratar de romper la ola. El resto han sido enumeradas hoy con pelos y señales por la directora gerente del Sespa, Concepción Saavedra. En cuanto a camas hospitalarias habilitadas para pacientes covid se refiere, el HUCA dispone de 60, Cabueñes de 45 y el San Agustín de 27. Además, tal y como afirmó Saavedra, los hospitales de Mieres y Langreo están preparados para recibir pacientes si fuese necesario.
También se ha reforzado el equipo de rastreadores, ahora formado por 170 profesionales. A ellos se les suma como refuerzos los militares de la base de Cabo Noval. También han sumado nuevos efectivos los laboratorios de análisis de pruebas. Estos aumentos en la plantilla están resultando fundamentales para gestionar la alta cantidad de positivos de las últimas fechas. Sin ir más lejos, ayer se contabilizaron 538 nuevos contagios.
Asimismo, también ha medrado la plantilla de auxiliares administrativos de los centros de salud en 61 efectivos. Con esto, Saavedra ha afirmado que se pretende desatascar la gestión burocrática de la atención primaria. También cuenta con seis nuevos psicólogos la línea telefónica de atención a pacientes.
Previsiblemente, este dique sanitario estará en pie hasta que no se alcance un mayor porcentaje de inmunidad. Actualmente tres de cada cuatro asturianos ya ha recibido al menos una dosis de la vacuna y más del 60% ha completado la pauta. Si bien, estas ratios descienden drásticamente en el caso de los menores de 30 años: sólo el 5% ha puesto el brazo.
