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El Juzgado investiga a NMR por estafa, blanqueo de capitales e insolvencia punible

Los socios de la empresa concursada no dan explicaciones sobre la operación, efectuada por la Guardia Civil e impulsada por Anticorrupción

Las oficinas de NMR en El Musel, en una imagen de archivo. | JUAN PLAZA

El juzgado de instrucción número 3 de Pozuelo de Alarcón (Madrid) está instruyendo diligencias por los supuestos delitos de estafa, blanqueo de capitales e insolvencia punible contra Natural Mining Resources 1926 (NMR), que en 2020 fue el principal operador de carbones de El Musel y patrocinadora del Real Oviedo hasta mediados de 2021. La investigación está impulsada por la Fiscalía Anticorrupción y se suma a otras denuncias penales contra la empresa, como la que interpuso Endesa también por supuesta estafa en otro juzgado de la misma localidad madrileña en la que tiene su sede NMR y en la que reside uno de los dos socios de la compañía, cuyo nombre responde a las iniciales A. B. S.

En el marco de esta investigación judicial, que cuenta con la asistencia de la Unidad Central Operativa de la Guardia Civil (UCO), es en el que se produjeron el pasado miércoles los registros en las oficinas de las minas de Pilotuerto (Tineo) y Carballo (Cangas del Narcea), así como en el domicilio en esta última localidad del otro socio de NMR, cuyo nombre responde a las iniciales D. R. M., y también en un céntrico piso de Oviedo, tal como adelantó ayer LA NUEVA ESPAÑA. La operación policial efectuada por agentes de la UCO, que en Asturias contaron con el apoyo de efectivos de la Comandancia de Oviedo de la Guardia Civil, se desarrolló en varias provincias.

D. R. M. declinó ayer ofrecer su versión sobre la operación de la UCO y la investigación judicial en marcha, mientras que su socio, A. B. S., no respondió al mismo ofrecimiento hecho por parte de este diario.

Los pormenores de la investigación judicial así como las implicaciones que puedan tener para los responsables de la empresa no han trascendido, al estar la causa sujeta al secreto de sumario.

NMR comenzó a operar en 2018 en El Musel y en solo dos años llegó a mover 4 millones de toneladas de carbón, fundamentalmente por el puerto gijonés, importando mineral de Rusia o países aledaños como Kazajistán, mezclándolo con carbón extraído de escombreras asturianas y exportándolo a otros países. A finales de 2020 ya comenzó a dejar impagos, en abril de 2021 declaró el preconcurso de acreedores y en octubre el concurso, con una deuda de 101,32 millones de euros y prácticamente sin activos para hacer frente a la misma. La sociedad atribuyó entonces la insolvencia al alza en los precios internacionales del carbón. Una deuda que puede incrementarse al no incluir cantidades pendientes de dilucidar en cortes de arbitraje internacionales. Uno de esos laudos, precisamente, cita a A. B. S. como supuesto CEO (Chief Executive Officer; el principal ejecutivo) de NMR 1926 a pesar de que no figura en el registro mercantil de España con ningún cargo en la empresa, cuya gestión formalmente recae sobre D. R. M.

Los gestores de NMR justificaron la insolvencia entre otras cosas a los 63,54 millones de euros que les adeudaban clientes, dándose la circunstancia de que de esa cantidad, unos 50 millones de euros se los deben empresas ligadas a alguno de los socios de NMR y afincadas en el extranjero. Además, la compañía dio por incobrables esos 50 millones cuando se declaró en concurso de acreedores, tal y como informó este diario el pasado mes de febrero.

La suspensión de pagos de NMR también levantó las sospechas de la Agencia Tributaria, que el año pasado pidió facturas a todas las empresas que trataron con NMR, así como geolocalización de portes de carbón a los transportistas que trabajaron para la firma.

El plan de pagos y viabilidad que presentó NMR para levantar el concurso de acreedores, que fue aprobado por acreedores que suman más de la mitad de las deudas a pesar de las dudas expresadas sobre el mismo por el administrador concursal, giraba en torno a centrarse en la explotación de la mina de Pilotuerto y de otra de arcilla en Salas, esta última paralizada administrativamente.

En cuanto a la de Pilotuerto, esta mina es propiedad de Victorino Alonso, y NMR la explota mediante un arrendamiento con opción de compra. La mina la explota S&M Explotaciones Mineras, que a su vez pertenece a una de la sociedades que adeudan dinero a NMR; Rio Blanco Ltd, que debe 17,92 millones a NMR. S&M explotaciones mineras está administrada por D. R. M. y entró en concurso de acreedores el pasado mes de junio.

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