Los asturianos, los que menos se divorcian

El amor está en el aire en Asturias. Algo debe de tener el Paraíso Natural para ser la comunidad autónoma en la que menos divorcios se producen. Todo es según se mire, pero las cifras están ahí. Las demandas de separación y de divorcio se mantienen estables en el segundo trimestre de 2023 y apenas crecen un 0,1 % con respecto al año anterior a nivel nacional. Pero en Asturias se redujeron un 28 % en un periodo en el que la tasa por cada 100.000 habitantes fue de 50,8 frente al 36,4 del Principado, la más baja de todo el país.

Según los últimos datos del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), en el primer trimestre de 2023, las demandas de disoluciones matrimoniales, nulidades, separaciones y divorcios habían descendido un 10,3 % con respecto al año anterior debido al impacto de la huelga de los letrados de la Administración de Justicia (LAJ) -un 12,2 % menos en el caso de Asturias-.

La cuestión es, más alla de las cifras, que el Principado se ha revelado además como uno de los lugares más idóneos para celebrar los enlaces nupcianles, un sector al alza que cada año atrae a más gente a casarse a Asturias. Buena meteorología, paisaje, patrimonio y una gastronomía de reconocido prestigio están detrás del tirón de la comunidad como paraíso nupcial.

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Hasta junio, apenas hay variación con respecto al año anterior en los datos en España y sólo las demandas de separaciones no consensuadas (249) presentaron una importante disminución (del 17,3 %) respecto a los meses de abril, mayo y junio de 2022.

Las separaciones consensuadas (665) aumentaron un 3,4 %; los divorcios no consensuados (9.269) se incrementaron un 1,7 %; y los divorcios de mutuo acuerdo (14.208) disminuyeron un 0,7 %. Mientras, en ese periodo de tiempo hubo 13 demandas de nulidad, lo que supone un descenso del 13,3 % respecto al año anterior.

El mayor número de demandas de disolución por cada 100.000 habitantes se dio en Canarias, con 63,4. Le siguieron Baleares (59,9); la Comunidad Valenciana (57,5); Galicia (56,2); Cataluña (54,2); Aragón (53,9); La Rioja (53,4); Castilla-La Mancha (52,9); y Navarra (51,3), territorios en los que en todos los casos se superó la media nacional, que fue de 50,8.

Por el contrario, las tasas más bajas se dieron en Asturias, con 36,4; Cantabria (41,8); Castilla y León (42,5), y País Vasco, con 43,8.

En cuanto a la demandas de guarda y custodia, las consensuadas aumentaron un 4,8 % respecto a las que se registraron en el segundo trimestre de 2022, hasta las 6.202, mientras que las no consensuadas (7.151), se incrementaron en un 5,9 %.

Las modificaciones de medidas consensuadas (3.332) disminuyeron un 1,9 % mientras que las no consensuadas (8.271), se redujeron en un 2,7 %. EFE