Amaya P. GIÓN

La joven empresa avilesina Instituto CIES suma un nuevo galardón en su palmarés. La consultora de base tecnológica, en economía e ingeniería informática, recibió en 2007 el premio emprendedor del año «Futuro Avilés» que otorga la Cámara de Comercio avilesina y esta semana ha sumado un nuevo galardón al recibir uno de los accésit que concede cada año la Asociación de Centros de Empresas Públicos del Principado de Asturias (Aceppa). La firma, que encabezan los avilesinos Javier García y Miguel Ángel Lubián, desarrolla ya su actividad desde sus nuevas oficinas del polígono empresarial de la ría en un año en el que ha tenido que «reinventarse» para hacer frente a la crisis económica.

Instituto CIES ya ha superado los doscientos clientes en sus apenas tres años de andadura. Aunque nació de la mano de alianzas estratégicas para desarrollar una línea de consultoría, el proceso de consolidación en el que se encuentra ahora le ha permitido crecer a estos dos emprendedores de forma más autónoma. Del vivero de La Curtidora, donde García y Lubián pusieron en marcha su negocio, CIES ha dado el salto al polígono de la ría. Ambos reconocen que han decidido quedarse en Avilés más con el corazón que con la razón. «Nuestro negocio está en la empresa privada, y no precisamente en Avilés. Podríamos habernos asentado en cualquier otro sitio, pero tanto Miguel como yo somos avilesinos, aquí nos criamos y aquí estamos dando trabajo a 16 personas de alta cualificación y con salarios superiores a la media», explicó el economista Javier García.

La empresa ha suscrito convenios de colaboración con varias departamentos universitarios del país (en Universidades como Oviedo, León o en la madrileña Carlos III, entre otras) y en uno de sus últimos proyectos ha contando con la colaboración de investigadores del prestigioso Instituto Valenciano de Investigaciones Económicas, una referencia en el país en su materia. La mayoría de su clientela se encuentra en el ámbito privado, desde microempresas hasta grandes compañías. «No obtuvimos beneficios hasta el año pasado y los hemos reinvertido en nuestra nueva sede. Nuestro compromiso es seguir invirtiendo en personal y equipamiento», añadió Lubián. Instituto CIES se encuentra, además, está inmersa actualmente en «procesos de expansión en nuevos mercados como Galicia o Extremadura, en líneas en las que tenemos un gran bagaje profesional, como todo lo vinculado a la seguridad informática y la protección de datos» apuntó Lubián.

Los socios no tienen más que halagos para la gestión de La Curtidora, donde germinó Instituto CIES, aunque consideran que al municipio le queda mucho camino por recorrer para atraer a jóvenes talentos. «En Avilés lo de los emprendedores es aún una especie de isla. Hay que seguir contribuyendo con equipamientos, aprovechar el impulso que puede suponer el Niemeyer y el camino hacia la sociedad del conocimiento. Emprender cuesta cada vez más, es difícil, requiere de mucho esfuerzo y capacidad para arriesgar. O la administración juega bien con las infraestructuras y crea un clima institucional favorable hacia las nuevas empresas o será muy difícil conseguir lanzar empresas que generen impuestos, por ejemplo, por más de 250.000 euros en un año, como es nuestro caso», comparten los impulsores de esta sociedad.

Instituto CIES no es ajena a los golpes de la actual coyuntura económica aunque su método de trabajo sirve de ejemplo al dicho de que «época de crisis es tiempo de oportunidades». Esta firma avilesina, de hecho, se ha reconvertido ante el nuevo mapa económico. «Hemos sido flexibles para adaptar y crear metodologías que ayuden a abordar los problemas a los que se enfrentan muchas en la actualidad. Ayudamos a las empresas a afrontar procesos de reconversión, de refinanciación de su deuda, a abordar análisis de nuevos mercados y oportunidades. Hemos adquirido una gran experiencia en afrontar planes estratégicos de innovación, así como de internacionalización».

En este sentido, García explica que uno de los mayores problemas al que se están enfrentando las empresas es a un ahogo por la falta de financiación, por una acumulación de deuda que ha vencido o empieza a hacerlo desde el inicio de la crisis, y no hay capacidad para devolverla. Existen muchos problemas para financiar planes de inversión que permitan abordar soluciones a las crisis de las empresas. La caída de las ventas están haciendo que muchos jóvenes, sobre todo menores de 40 años, con contratos laborales temporales, hayan perdido su empleo, y los Expedientes de Regulación de Empleo emergieran con fuerza después de un año del comienzo de la crisis financiera (y se acumulen los problemas financieros con las caídas de las ventas).

Ante esto, Instituto CIES constata que la innovación y el acceso a los recursos públicos para la I+D se están convirtiendo en grandes instrumentos para abordar planes de futuro en las empresas y, con ello, además, afrontar los problemas serios de tesorería que existen de forma generalizada. La innovación y las ayudas públicas pueden ayudar a frenar el proceso de los ERE, pero aún hay muchos millones de euros en las convocatorias públicas a la innovación que las empresas no son capaces de canalizar. En este sentido, Instituto CIES considera que con una planificación y trabajo adecuados con las empresas, se pueden abordar con más garantías los procesos de cambio y de crisis.