La iglesia de los Padres Franciscanos, el edificio más antiguo de la ciudad, va recuperando poco a poco su esplendor. Las labores de desmontaje del convento permiten ver el viejo ábside, que no estará lustroso hasta mediados de 2010. Una vez desmontado el convento, comenzarán los trabajos de restauración de las fachadas del ábside. En la fotografía, un avilesino observa la evolución de los trabajos en la plaza de Carlos Lobo.