Todos los grupos de la oposición instaron ayer al Principado a asumir de inmediato la gestión del colector industrial de la margen derecha de la ría, finalizado hace casi seis años por la Confederación Hidrográfica del Cantábrico tras una inversión de 16 millones de euros. El PSOE votó en contra de la moción presentada por Somos, ya que defendió que la Consejería de Medio Ambiente, Ordenación del Territorio e Infraestructuras no "puede poner en marcha una instalación con las condiciones que, ahora, pone la Confederación Hidrográfica". Según explicó el portavoz socialista, Luis Ramón Fernández Huerga, la tubería, tal y como está en la actualidad, "no cumple" con las medidas medioambientales respecto a vertidos extraordinarios.

"La obra está hecha conforme al diseño y a eso se ajusta el convenio firmado. Ahora, después de haber reparado las deficiencias detectadas, dice la Confederación que se lo da al Principado, pero que el colector, así, no se puede poner en marcha porque si hay vertidos, le va a multar. No le podemos pedir a la Consejería que asuma una obra que nosotros como Ayuntamiento tampoco aceptaríamos", afirmó el concejal socialista. Fernández Huerga explicó que la Consejería intentó, sin éxito, llegar a un acuerdo con Confederación para que fuera esa administración estatal la que se hiciera cargo de la gestión hasta que se solventaran los problemas, "como ya hizo con otras instalaciones en Asturias", como la del Bajo Nalón o la depuradora de Las Caldas. "La Consejera se reunió después con la Ministra y parece que sí hubo un acercamiento de posturas, por lo que confío en que lleguen a un acuerdo", comentó el portavoz del gobierno local.

La oposición, por su parte, rechazó esas explicaciones y siguió adelante con la aprobación de la moción, en la que también se insta a las partes "a que sigan colaborando para que, en caso de que el proyecto diseñado y ejecutado contuviera algún tipo de carencias estructurales por las que una vez puesto en marcha se corriese riesgos de posibles vertidos, se puedan corregir, poniendo por encima de intereses espurios el interés general que en este caso no es otro que el de conseguir una ría de Avilés libre de vertidos y descontaminada".

David Salcines, portavoz de Somos y defensor de la moción, reprochó a Fernández Huerga que hablara como portavoz del PSOE y no "defendiendo los intereses avilesinos". "Estamos ante una de las mayores inversiones de Avilés, que está paralizada y, como consecuencia, incumpliendo la ley medioambiental. Esto ya empieza a parecerse una telenovela. Cada vez que abarcamos una cuestión fundamental de infraestructuras, siempre se encuentran problemas", aseveró.

El portavoz de Somos puso en cuestión el papel jugado por Manuel Gutiérrez, que en su momento, "era uno de los responsables de Confederación y uno de los encargados del proyecto del colector y hoy es director de Calidad Medioambiental del Principado, que rechaza el proyecto; esto no tiene sentido alguno". "Si la Consejería quiere una infraestructura mejor, tiene que explicar por qué no se dieron los pasos para conseguirlo. Si no es la obra que necesitamos, ¿por qué se dio de paso en su momento?", inquirió Salcines.

El resto de grupos de la oposición también reprocharon los años de demora de la puesta en marcha del colector. "Es una de las historias interminables de Avilés. Y para los ciudadanos y los políticos es difícil saber por qué llegamos a esta situación. La obra está hecha, hay un convenio entre administraciones y se solventaron los defectos. Por eso apoyamos la moción, para exigir que se cumpla", afirmó Carlos Rodríguez de la Torre, portavoz del PP.