balcón al muelle

La esencia del municipalismo

De cómo la propuesta de una alianza comarcal para impulsar la reforma de la depuradora de Maqua se encontró con el rechazo avilesino a seguir la máxima de que la unión hace la fuerza

Alberto Tirador, Mariví Monteserín, Iván Fernández, Yasmina Triguero, Jaime Menéndez y Jorge Suárez en una imagen de archivo.

Alberto Tirador, Mariví Monteserín, Iván Fernández, Yasmina Triguero, Jaime Menéndez y Jorge Suárez en una imagen de archivo. / MARA VILLAMUZA

Covadonga Jiménez

Covadonga Jiménez

Tras una semana con diversas voces sumándose a la idea de impulsar un "lobby" comarcal para que, como planteó el Alcalde de Gozón, "de una santísima vez" logre ver la luz la esperada reforma de la depuradora de Maqua, el gobierno avilesino se descolgaba este viernes de la propuesta. Rechazan unirse al planteamiento del regidor gozoniego, que sumó los apoyos de Illas y Castrillón en una hipotética alianza entre administraciones locales –la esencia del municipalismo– para exigir (al Gobierno central) la intervención pendiente en la infraestructura de Maqua.

A la exasperación que representa casi dos años sin noticias ni avances por parte del Gobierno central, en el penúltimo pleno municipal del mandato se conoció que el ejecutivo socialista irá por libre en esta lucha a un próximo encuentro con la ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, de la mano del consejero de Cambio Climático y vicepresidente del Principado, Juan Cofiño, para "abordar el asunto".

El "asunto" al que hacen referencia desde el gobierno local desespera a partes iguales a vecinos y fuerzas políticas de todo signo por no cumplir con las expectativas que se tenían puestas en ello, pero exaspera también porque lleva el punto de causar irritación y enfado la (in)acción del otro (el Gobierno central), bien sea de forma consciente o inconsciente. Y es justificado, a estas alturas, llegar incluso a estallar (de ira).

La razón esgrimida desde el gobierno avilesino para no entrar en esa alianza de administraciones locales que, en el fondo, son las que conforman la comarca avilesina, es que trabajan "desde la política" y no actúan "en frentes ni ‘lobbies’ de presión".

Gestionar, tanto en los puestos de liderazgo como en la oposición, implica buscar un equilibrio entre proteger y cuidar a nuestros vecinos, los más cercanos, e impulsar la economía. En el ámbito municipal también juega un papel muy relevante lo cercano, mirar a las personas de frente y dar respuesta y resolver sus inquietudes, con responsabilidad, sensibilidad y, por qué no, también con grandes dosis de humildad. Esa es, sin duda, la esencia del servicio público.

También se ha quedado solo el PSOE en el Parlamento asturiano en su rechazo a estudiar, como mínimo, la posibilidad de que el servicio ferroviario llegue al Aeropuerto de Asturias para conectarlo con las principales ciudades de la región.

La idea, defendida desde hace décadas por el Ayuntamiento de Castrillón, refrendada ahora por las tres Cámaras de Comercio, la patronal turística Otea y la asociación Avilés Club de Empresas, se entiende no solo como una opción para dar servicio a quienes llegan al aeródromo asturiano sino también para el desarrollo del turismo de congresos y de eventos en aras de desestacionalizar la economía turística además de crear empleo. Ninguna inversión se da por perdida si lo que viene es a resolver una carencia del presente. Lo explicaron bien desde las filas de Ciudadanos: "Tener el aeropuerto a media hora de las principales ciudades es un handicap competitivo y una anomalía que no se da en ninguna otra región; pero moverlo es imposible, así que debemos ‘acercarlo’ mejorando el transporte público".

Cuando en el verano de 2018 se daba a conocer el embrionario "lobby" empresarial del Noroeste para defender los intereses comunes de Asturias y Galicia (con Castilla y León, entonces) se escenificó una unidad hasta entonces desconocida que se ha visto ampliado ahora al sumarse los gobiernos cántabro y vasco para dar un impulso a Corredor Atlántico a través de una macrorregión donde agentes económicos y sociales defienden intereses comunes en estos territorios.

Los presidentes de las cuatro autonomías, convocados en Vitoria por el lehendakari, Iñigo Urkullu, se han dado la mano en ese frente común para que su voz llegue con más claridad no solo al Gobierno de Pedro Sánchez, sino que también se escuche en las instituciones europeas.

Ese lobby atlántico no quiere perder influencia en las esferas políticas donde se toman las decisiones y ante el temor a que varíe el centro de gravedad de la Unión Europea y el foco de interés se desplace al este. No debería perder la oportunidad de seguir ese ejemplo la comarca avilesina, tengan la fuerza que tengan en diferentes espacios de decisión sus alcaldes y alcaldesas. Integrar equipos diferentes en una misma estrategia siempre es sinónimo de éxito.

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