El Eulalia-Langreo continúa con su crecimiento. El equipo langreano cuenta ya con más de trescientos jugadores en sus categorías inferiores, síntoma del buen hacer del club. El objetivo de la cantera del Langreo no es otro que acabar surtiendo de jugadores al primer equipo. Y es que el Eulalia completa su segunda temporada de su convenio con el Unión, un acuerdo con cuatro años de duración y en el que se empiezan a ver sus frutos.
Cima continúa como presidente del club, mientras que Luis realiza las labores de vicepresidente y Secundino Díaz como secretario. Una directiva que completa Ildefonso. El propio Secundino Díaz se muestra "contento" con la cantidad de jugadores con los que cuentan en la cantera. "Es el síntoma del trabajo bien hecho, estamos recuperando jugadores de la zona que antes se encontraban dispersos en otros clubes", asegura. Para Díaz, el convenio "es positivo para las dos partes, todos estamos contentos" y expresa que "uno de los objetivos a largo plazo es ver al primer equipo del Langreo con una cantidad alta de jugadores formados en nuestra cantera".
Con el ascenso del juvenil en la pasada temporada, el Eulalia ha conseguido el objetivo de tener, al menos uno de sus conjuntos de cada categoría, en Segunda División. Desde el conjunto langreano distinguen a la perfección el objetivo formativo del competitivo. Es por ello por lo que Secundino Díaz asegura que "en los equipos que tenemos en Segunda buscamos competir, con el resto tratamos de seguir formando futbolistas". En ese sentido, dos de los prebenjamines de la entidad compiten en el Torneo Ciudad de Oviedo, que se celebra en Ventanielles. "Es el primer paso para que se aproximen a lo que es una liga federada, estamos hablando de jugadores que aún son muy pequeños y por edad no están para competir en la liga federada".
Los equipos del Eulalia disputan sus partidos en el campo de Ganzábal, mismos escenario del Unión. "Es importante que los chavales se vean en el mismo escenario que el primer equipo", destaca el secretario. Además, dos futbolistas de la primera plantilla azulgrana, como son Pablo Acebal y Adrián Torre dirigen sendos equipos alevines de la entidad. En ese aspecto, se marcan otra meta, "ser una cantera de grada". Con la presencia de jugadores del primer equipo en el fútbol base, muchos chavales terminarán por acudir a Ganzábal a ver al Unión Popular de Langreo por el hecho de que su entrenador juega un partido. Esto terminará por crear una mayor identificación con el equipo local.
Respecto a la captación, el Eulalia continúa con su misma filosofía. "Nosotros no vamos a ir a buscar jugadores a otros equipos ni a ir a hablar con los padres", destaca Díaz. El trabajo que se lleva a cabo en el club es la receta para que los futbolistas acudan al Eulalia. "A la larga van a acabar llamando a las puertas del club y nosotros los recibiremos con las puertas abiertas", apunta el secretario del equipo. Se trata de un objetivo a largo plazo.
Y es que en la Cuenca Minera existe una gran tradición futbolística. "Hay mucha gente que acude a ver los partidos y que arrima el hombro" asegura el secretario del club, quien pone como pega "los horarios del fútbol profesional, que siempre nos quitan gente, aunque ante eso no se puede hacer nada".
Precisamente con los horarios de juego tienen que hacer malabarismos cada fin de semana en Ganzábal para dar cabida a todos los equipos. "Supone bastante trabajo, aunque este año no tenemos la liga de fútbol 7 y nos da más margen", considera Díaz.
Esta temporada el Eulalia ha recuperado el equipo de Segunda Regional, el cual está cuajando una gran campaña. El técnico de ese conjunto es un mito de la historia del Langreo, Ricardo Terente, quien rechazó ofertas de superior categoría para regresar a casa. "Genera un efecto llamada y además nos ayuda con la coordinación de la cantera, es un lujo", destaca Díaz. Y es que de los ocho juveniles que cumplieron su etapa formativa en la pasada temporada, siete siguen en el Regional. "Ellos tienen prioridad absoluta", afirma Díaz. En el presente curso, varios de los jugadores de la cantera ya se han ejercitado y debutado con el conjunto de Tercera dirigido por Hernán. La recompensa del duro trabajo que se lleva a cabo en el Eulalia comienza a dar sus frutos.
