Varias mujeres a título personal y el grupo municipal de Somos en Siero denunciaron ayer que la organización de la II Carrera Popular contra la Violencia de Género, que se disputará el domingo, impide la participación de homosexuales en la categoría de parejas por la obligación de que éstas estén formadas por un hombre y una mujer. Algo que consideran una discriminación que instan a corregir con vistas a próximas ediciones, mientras que la edil de Bienestar Social justifica la cláusula por la intención de incentivar la participación masculina en la cita reivindicativa.

La concejala de Somos, Ana Ballester, calificó el contenido de las bases de la prueba como "un paso atrás" en la lucha por acabar con los estereotipos en las parejas y aunque consideró que el requisito "no es malintencionado", cree que defender el contenido de las bases es un error. "El contenido de las mismas no ayuda a caminar sobre la igualdad", declaró la concejala.

En la misma línea se manifestón el grupo de mujeres que comenzó a movilizarse al comprobar que no podían inscribirse para la categoría de parejas junto con otras féminas. "Creemos que estas condiciones discriminan a las parejas formadas por personas del mismo sexo", comentó Marta Braña, ejerciendo como portavoz de una decena de mujeres de distintos puntos del concejo de Siero, Oviedo y Gijón, todas ellas molestas por las condiciones impuestas para la inscripción.

Otro de los aspectos que provoca las quejas tanto de Somos como de estas mujeres es la propia denominación de la cita, pues consideran que debería llamarse Carrera Popular contra la Violencia Machista y no contra la violencia de género. "El término utilizado no sólo discrimina a todas las personas que son agredidas y que no se sienten identificadas con uno de los géneros, sino que tergiversa la realidad", coinciden en señalar tanto el grupo de mujeres como la formación política a la que solicitaron ayuda para sacar a la luz esta situación.

"Consideraron que coincidíamos con sus ideas y acudieron a nosotros", explica Ballester para justificar la implicación de Somos en esta causa, que trasladaron sin éxito a la concejala de Bienestar Social, Natividad Álvarez. "La concejala no ha querido escuchar, reflexionar ni aceptar sus errores", apuntan.

Por su parte, la propia Álvarez niega cualquier intención de discriminación en la prueba que se desarrollará el domingo por la mañana entre El Berrón y Pola de Siero, y justifica la orientación de las bases en el interés por aumentar la participación masculina. "Se hizo así porque en la lucha frente a la violencia contra la mujer debemos ir unidos hombres y mujeres, y se creyó que era una forma para conseguirlo", explica la edil, que recuerda que las propias bases descartan que tenga que haber relación afectiva entre los participantes. "Pueden participar chico y chica, padre e hija o abuela y nieto", apunta.

Por otro lado, apunta que el hecho de que el nombre incluya la expresión "violencia de género", denominación que asegura fue aprobada por el Consejo de la Mujer, se debe a la legislación vigente. "En asuntos oficiales hay que tener en cuenta la ley vigente y ésta habla de violencia de género en vez de violencia machista", señala la edil, que no descarta que esto cambie en próximas ediciones a la par que las denominaciones que marque la ley.

Asimismo, Álvarez lamentó que se polemice sobre un asunto tan sensible y en el que, a su entender, es necesaria la unión de todos."Es triste y lamentable que con la que está cayendo metamos por el medio cuestiones homofóbicas en algo que no tiene nada que ver con la orientación sexual", manifestó, al tiempo que hizo un llamamiento para zanjar el asunto. "Lo que prima es que todos vayamos contra la violencia de género, machista o como la queramos llamar, sin distorsionar el fin por el cual se organiza la iniciativa", añadió Álvarez.