Cima: "Que te den un premio en tu pueblo es la mayor distinción que puede haber"

Los lugonenses homenajearon ayer a uno de sus vecinos más ilustres. José Enrique Cima, que tocó la gloria con los dedos como ciclista para después narrar las gestas de otros en las páginas de LA NUEVA ESPAÑA, recibió ayer el galardón "Pueblo de Lugones". Un premio entregado por la asociación folclórica "La Sidrina", en reconocimiento a una prolongada y ejemplar labor profesional, en uno y otro ámbito, y siempre vinculada a la localidad sierense.

"Recibir este premio en tu pueblo es la mayor distinción que se le puede entrega a uno. Estoy seguro de que hay algunos con tantos méritos o más que yo, por eso lo recibo con mucho cariño", afirmó al recibir el galardón de manos de la presidenta de "La Sidrina", Edita Reguera.

Acto seguido, el exciclista recordó con emoción a todos los que le antecedieron en el palmarés del premio, muchos de ellos amigos suyos, y también a los receptores del premio "Puente Vieyu", del que este premio de "La Sidrina" es sucesor. Un galardón, el "Puente Vieyu", que tres décadas atrás recibió su padre, Enrique Cima Cimadevilla, por su promoción del deporte en la localidad sierense.

"Aquel premio me quedó grabado para siempre, por lo que este es un honor doble para toda la familia Seguro que mis nietos, Rodrigo, Aitana, Álvaro y Alonso, el día de mañana estarán tan orgullosos como yo ahora de tener un 'bisa' y un abuelo que recibieron las máximas distinciones de su pueblo", afirmó, emocionado, Cima.

De su etapa como ciclista, Cima celebra el hecho de que, gracias a sus triunfos, el nombre de Lugones comenzó a ser conocido fuera de las fronteras asturianas. "Que muchos me colocaran como el futuro sucesor de nuestro campeón José Manuel Fuente, 'El Tarangu', fue un gran elogio que no llegué a completar debido a una lesión en la espalda que solamente me dejó rendir, a gran nivel, durante tres temporadas", rememoró Cima, que no obstante se enorgullece de que sus 27 triunfos como profesional sirviesen "para que mi pueblo de Lugones apareciera en muchos medios de comunicación, incluso en grandes titulares". Era un tiempo, como recordó el galardonado, en el que Lugones no era la ciudad que hoy es. "En Lugones éramos cuatro pelagatos", concretó el galardonado, "y ahora somos 20.000 vecinos". Un crecimiento propiciado, en gran medida, por la llegada de mucha gente atraída por la cercanía con Oviedo, que el deportista insta a aprovechar: "Hay que valorar mucho a los que por trabajo vinieron a vivir al pueblo y encima están dando la cara, ayudando por mejorar la vida y ambiente de Lugones".

El colofón a la entrega del premio llegó con la actuación, inesperada, del dúo "Clarín", amigos de Cima, que le dedicaron un par de canciones.