Una vida hecha a recortes. Esta es la esencia del "scrapbook" (que se puede traducir como "libro de recortes"), una labor importada de Estados Unidos que consiste en la elaboración de agendas, álbumes y cuadernos decorados a golpe de papeles coloridos, telas, estampaciones y cuños. Una vuelta de tuerca a aquellas carpetas decoradas con fotos de sus ídolos, que llevaban a clase orgullosas las jóvenes de los noventa. La manualidad arrasa y ocupa cientos de blogs en la red. También ha empezado a copar las calles y ya ha llegado hasta las Cuencas.
Si el "scrapbook" tuviera un club de fans en las valles mineros, la turonesa Elena Álvarez Noriega bien podría ser la presidenta. Esta joven, de treinta y dos años, es licenciada en Ingeniería Técnica Forestal. Cuando terminó la carrera se dedicó a la formación, pero la crisis la puso a la cola del paro. Repartió currículum por toda la región y trabajó en supermercados y empresas eléctricas. En los ratos libres de su búsqueda incansable de empleo, se aficionó al "scrapbook": "Mi amiga Noelia, que tiene un blog que se llama 'Yarelia', me enseñó mucho sobre 'scrap'", explica la mierense. En las fiestas de El Cristo de Turón quiso dar un paso más en su formación y se apuntó a un taller organizado por una asociación profesional. Ya no pudo soltar las tijeras.
Empezó a recortar con ganas para un blog que le hizo un nombre: "La estantería de Elena". En su página web, aún activa aunque ahora con pocas entradas, compartía con los seguidores todos los trucos para hacer álbumes pintorescos y agendas para animar los días con muchos colores. También objetos de decoración, como letras forradas de telas floridas o colgadores para dejar las llaves cerca de la puerta de casa. Fue el principio de lo que ahora es su forma de vida: "Me di cuenta de que muchos aficionados de Asturias no tenían donde ir a comprar y querían una formación más directa", señala.
El número de seguidores crecía sin parar y las preguntas se disparaban entre los comentarios de sus entradas. Así decidió embarcarse en una nueva experiencia laboral y montó "La estantería", la primera tienda de "scrapbook" en la comarca del Caudal. En el establecimiento, Elena Álvarez vende objetos para aficionarse a los libros de recortes y para perfeccionar las labores. "Hace diez años no imaginaba que me dedicaría a esto", explica, mientras coloca el escaparate con adornos vintage. Desde su mostrador, ha sido fiel testigo del aumento en la afición entre los vecinos de Mieres: "Cada día somos más, creo que llegará a haber una comunidad de 'scrap' como la que hay en otras partes de España", afirma.
Las labores son bonitas, aunque hay que tener cierto conocimiento previo para no perderse entre recortes. Elena Álvarez Noriega también ofrece formación de "scrap" y convoca talleres frecuentemente. Dice que algo de maña es necesaria, aunque lo principal es tener paciencia.
