La Policía Nacional ha detenido en Mieres a una banda itinerante que se dedicaba a robar en todo tipo de establecimientos comerciales, aunque de manera más habitual en supermercados. El operativo se activó a raíz de una denuncia presentada por la encargada del centro comercial que Alimerka tiene en la Mayacina, en pleno centro de la ciudad. Los trabajadores identificaron a dos mujeres cuando intentaban sustraer varios productos. Los agentes encargados del caso, tras una rápida investigación, pudieron confirmar que el grupo estaba integrado por dos mujeres y un hombre. Utilizaban el carricoche de un bebé de aproximadamente un año de edad para esconder la mercancía. En el vehículo que utilizaban se localizó gran cantidad de productos, desde perfumes a bebidas alcohólicas o alimentos.

Este grupo de delincuentes, según ha podido confirmar la Policía Nacional, son naturales de Valladolid. Todo indica que venían actuando desde hace tiempo cambiando periódicamente de centro de operaciones para no llamar la atención. En el caso de Mieres, las pesquisas apuntan a que llevaban varios días en el municipio robando en diferentes establecimientos. Cuando fueron detenidos tenían en el coche mercancía por valor de más de mil euros. Al superar los 400 euros, serán juzgados por un delito y no por simple hurto, lo que podría aumentar el alcance de la hipotética condena. Por ejemplo, tenían en su poder más de un centenar de conservas de atún en aceite de oliva, aunque el "botín" que habían logrado era muy heterogéneo.

El dispositivo policial se activó a raíz de una denuncia presentada por Alimerka. Las trabajadores de la mediana superficie de la Mayacina detectaron que las dos mujeres que integran el grupo habían salido del establecimientos sin abonar varios artículos, entre ellos, una garrafa grande aceite. En ese momento dieron aviso a la Policía Nacional. Tras revisar las grabaciones de las cámaras de seguridad, los agentes confirmaron los hechos denunciados por las dependientas. Tras una rápida investigación, los agentes de la Comisaría de Mieres identificaron el vehículos de los infractores. Estaba estacionado en el mismo aparcamiento del centro comercial, un amplio espacio con capacidad para casi medio centenar de coches. En el interior del turismo encontraron una enorme cantidad de productos, lo que hizo sospechar a los policías de que el grupo había cometido también robos en otros establecimientos del municipio.

El modo de actuar de los delincuentes, según confirmaron las grabaciones de las cámaras de seguridad, era muy simple. Utilizaban el carricoche del bebé para esconder la mercancía. La silla tenía una especie de falso fondo que se había habilitado para guardar la mercancía. Además, idearon un sistema casero para aislar el habitáculo y lograr evitar que saltaran las alarmas. De esta forma pasaban por las cajas abonando una compra pequeña y sin llamar la atención.

Los tres integrantes del grupo han sido puestos a disposición judicial. Mientras estuvieron en los calabozos de la comisaría de Mieres el bebé se mantuvo bajo custodia de la administración regional en dependencias sanitarias de Oviedo. Los alimentos perecederos incautados en la operación han sido cedidos al comedor solidario de Amicos. Gran parte de la mercancía ha sido devuelta a los establecimientos de donde fue robada.