Un argayo mantuvo cerrado durante toda la jornada de ayer uno de los carriles de la carretera AS-117 (Riaño-Puerto de Tarna) en la proximidades de Campo de Caso. Los operarios que se ocupan de retirar las rocas de la calzada, algunas de ellas de varias toneladas de peso, esperaban poder despejar totalmente la vía a última hora del día para permitir el paso de la circulación por ambos carriles.

El desprendimiento de tierra y rocas se produjo como consecuencia de las intensas lluvias caídas en las últimas horas. Tuvo lugar sobre las 2.00 de la madrugada del jueves y ocupó los dos carriles de la vía en un tramo del Corredor del Nalón próximo al túnel de Fastia, a unos 300 metros del desvío hacia Coballes. Operarios del Principado se desplazaron hasta la zona y lograron retirar las rocas de uno de los carriles, en sentido Campo de Caso, por el que se fue dando paso alternativo a los vehículos que transitaban por la vía. Los trabajos prosiguieron a lo largo de toda la jornada para tratar de despejar el otro carril.

"En la jornada del miércoles llovió mucho en esa zona; parte de la ladera se cuarteó y cayeron sobre la vía rocas de varias toneladas de peso. Afortunadamente el suceso tuvo lugar a una hora en la que no había coches circulando por el tramo", explicó el alcalde de Caso, Tomás Cueria, que añadió: "Los operarios han tendido que cortar algunas rocas para poder trasladarlas debido a su gran tamaño".