Ella rompió la relación y él intentó matarla. La Fiscalía del Principado de Asturias solicita 12 años de prisión y 8 de libertad vigilada, que incluye la prohibición de residir en Mieres durante ese periodo, para el procesado por intentar asesinar a su expareja cuando ella decidió terminar la relación. La vista oral está señalada mañana, 18 de enero de 2018, en la Sección Tercera de la Audiencia Provincial, en Oviedo, a las 10,00 horas.

El Ministerio Fiscal sostiene en su escrito que el procesado, nacido en 1945, mantuvo una relación sentimental de noviazgo, sin convivencia, durante un año y cuatro meses", con la mujer, nacida en 1975.

Ella puso fin a esa relación que, según el Ministerio Fiscal, estuvo caracterizada por el sometimiento de ella al procesado, quien se imponía a ella y la controlaba, dada la considerable diferencia de edad entre ambos". Una diferencia de más de 30 años. También marcada por el carácter que mostraba él: violento, celoso y posesivo, hasta el punto de

Ella rompió la relación y él intentó matarla. La Fiscalía del Principado de Asturias solicita 12 años de prisión y 8 de libertad vigilada, que incluye la prohibición de residir en Mieres durante ese periodo, para el procesado por intentar asesinar a su expareja cuando ella decidió terminar la relación. La vista oral está señalada mañana, 18 de enero de 2018, en la Sección Tercera de la Audiencia Provincial, en Oviedo, a las 10,00 horas.

El Ministerio Fiscal sostiene en su escrito que el procesado, nacido en 1945, "mantuvo una relación sentimental de noviazgo, sin convivencia, durante un año y cuatro meses", con la mujer, nacida en 1975.

Ella puso fin a esa relación que, según el Ministerio Fiscal, "estuvo caracterizada por el sometimiento de ella al procesado, quien se imponía a ella y la controlaba, dada la considerable diferencia de edad entre ambos". Una diferencia de más de 30 años. También marcada por el carácter que mostraba él: violento, celoso y posesivo, hasta el punto de considerarla un objeto de su propiedad. "Le llegó a decir, en más de una ocasión, que no la mataba porque la quería, pero que si le fallaba en algo la mataría", afirma la Fiscalía.

Durante la relación, la mujer "soportó varias agresiones que no se atrevió a denunciar". "No obstante, la última vez que la golpeó sí tomó la decisión de romper definitivamente con el procesado, ruptura que éste en modo alguno aceptó y que consideró una traición", añade el relato del Ministerio Fiscal.

Los hechos relatados por la Fiscalían ocurrieron el 16 de diciembre de 2016. Así, indican que "con un cuchillo de 15 centímetros de longitud que llevaba oculto en una bolsa y, sabiendo que la mujer había ido a una peluquería de la calle La Vega, Mieres, sobre las 19.15 horas, se apostó en la entrada, pegado a la pared, y, cuando ella salió, se abalanzó sobre ella, empujándola'. "Ésta, alarmada al verlo, entró de nuevo en la peluquería para refugiarse", añade.

El procesado la siguió y trató de calmarla, diciéndole que estaba muy guapa, que no se asustara, apunta el escrito. También "que saliera con él, por lo que viendo que se comportaba normalmente, ella se relajó, mostrando una actitud confiada y se acercó a él". "Fue entonces, cuando el procesado, decidido a matarla, sacó del interior de la chaqueta el cuchillo que llevaba escondido y lo dirigió directamente hacia el abdomen de la mujer con la intención de clavárselo, si bien ésta reaccionó instintivamente y consiguió repeler el ataque sujetando el arma con la mano izquierda, hasta que el procesado la tiró al suelo, colocándose encima".

La Fiscalía apunta que, en ese momento, llegaron otras personas en su auxilio y consiguieron apartar al acusado de la mujer. Ella permanecía tendida en el suelo.

La mujer sufrió lesiones consistentes en herida inciso-contusa en la palma de la mano izquierda, que curó en 7 días. Le quedó como secuela una cicatriz de 0,5 centímatros, sin perjuicio estético.

El procesado se encuentra en situación de prisión provisional, con la prohibición de aproximarse a ella a menos de 500 metros, a su domicilio y cualquier lugar donde se encuentre, así como la prohibición de comunicarse con ella por cualquier medio, hasta la finalización del procedimiento mediante una sentencia firme.

La Fiscalía considera que los hechos son constitutivos de delito de asesinato en grado de tentativa, recogido en los artículos 16 y 66 del Código Penal. Según la Fiscalía, concurren las circunstancias agravantes de razones de género y de parentesco.

La Fiscalía solicita, por tanto, la condena del procesado a 12 años de prisión, inhabilitación especial para el ejercicio del derecho de sufragio pasivo durante el tiempo de la condena y prohibición de aproximarse a ella menos de 500 metros durante un periodo superior en 8 años al de la pena de prisión impuesta en sentencia. Además de la prohibición de comunicarse con ella por cualquier medio durante el mismo periodo de tiempo; así como la medida de libertad vigilada durante 8 años. un objeto de su propiedad. Le llegó a decir, en más de una ocasión, que no la mataba porque la quería, pero que si le fallaba en algo la mataría, afirma la Fiscalía.

Durante la relación, la mujer "soportó varias agresiones que no se atrevió a denunciar". "No obstante, la última vez que la golpeó sí tomó la decisión de romper definitivamente con el procesado, ruptura que éste en modo alguno aceptó y que consideró una traición", añade el relato del Ministerio Fiscal.

Los hechos relatados por la Fiscalían ocurrieron el 16 de diciembre de 2016. Así, indican que "con un cuchillo de 15 centímetros de longitud que llevaba oculto en una bolsa y, sabiendo que la mujer había ido a una peluquería de la calle La Vega, Mieres, sobre las 19.15 horas, se apostó en la entrada, pegado a la pared, y, cuando ella salió, se abalanzó sobre ella, empujándola'. "Ésta, alarmada al verlo, entró de nuevo en la peluquería para refugiarse", añade.

El procesado la siguió y trató de calmarla, diciéndole que estaba muy guapa, que no se asustara, apunta el escrito. También "que saliera con él, por lo que viendo que se comportaba normalmente, ella se relajó, mostrando una actitud confiada y se acercó a él". "Fue entonces, cuando el procesado, decidido a matarla, sacó del interior de la chaqueta el cuchillo que llevaba escondido y lo dirigió directamente hacia el abdomen de la mujer con la intención de clavárselo, si bien ésta reaccionó instintivamente y consiguió repeler el ataque sujetando el arma con la mano izquierda, hasta que el procesado la tiró al suelo, colocándose encima".

La Fiscalía apunta que, en ese momento, llegaron otras personas en su auxilio y consiguieron apartar al acusado de la mujer. Ella permanecía tendida en el suelo.

La mujer sufrió lesiones consistentes en herida inciso-contusa en la palma de la mano izquierda, que curó en 7 días. Le quedó como secuela una cicatriz de 0,5 centímatros, sin perjuicio estético.

El procesado se encuentra en situación de prisión provisional, con la prohibición de aproximarse a ella a menos de 500 metros, a su domicilio y cualquier lugar donde se encuentre, así como la prohibición de comunicarse con ella por cualquier medio, hasta la finalización del procedimiento mediante una sentencia firme.

La Fiscalía considera que los hechos son constitutivos de delito de asesinato en grado de tentativa, recogido en los artículos 16 y 66 del Código Penal. Según la Fiscalía, concurren las circunstancias agravantes de razones de género y de parentesco.

La Fiscalía solicita, por tanto, la condena del procesado a 12 años de prisión, inhabilitación especial para el ejercicio del derecho de sufragio pasivo durante el tiempo de la condena y prohibición de aproximarse a ella menos de 500 metros durante un periodo superior en 8 años al de la pena de prisión impuesta en sentencia. Además de la prohibición de comunicarse con ella por cualquier medio durante el mismo periodo de tiempo; así como la medida de libertad vigilada durante 8 años.