No eran los premios "Princesa de Asturias", pero los galardonados estaban muy nerviosos y con las emociones casi al aire. Cuatro miembros de la Brigada de Salvamento Minero, los lenenses que participaron en las labores para encontrar al pequeño Julen (en Totalán, Málaga) -Sergio Tuñón, Antonio Ortega, Rubén García y Adrián Villarroel-, recogieron ayer una placa del Ayuntamiento de Lena como premio a su trayectoria. Lo hicieron rodeados de los suyos: amigos, vecinos, madres, mujeres e hijos que llenaron el salón de actos de la Casa de Cultura de la Pola. Fueron escuetos en las declaraciones y sólo habló el director técnico, Sergio Tuñón: "Gracias por cuidar a nuestras familias, gracias a vosotros pudimos hacer tranquilos nuestro trabajo", dijo a sus vecinos.

"Nuestro trabajo". Lo han repetido muchas veces desde que participaron en la búsqueda del pequeño Julen. Ellos fueron los primeros en llegar a él, a través de un túnel que tuvieron que cavar tras llegar al subsuelo en una cápsula que hizo las veces de apretada jaula. Salvar a otros, aún con el aire contado, es la labor que desempeña esta brigada que fue creada hace un siglo.

Hizo falta un rescate a contrarreloj y mediático para que el trabajo de tantos mineros se reconociera. Quizás porque no se sienten dueños de su historia, son reacios a las apariciones públicas. Aunque en las últimas semanas han hablado para los medios varias veces, aún les cuesta estar quietos en la silla. Mientras Tuñón intervenía en el acto, las piernas de algunos no dejaban de moverse. Puros nervios de la emoción de verse en casa.

A sus vecinos, dijo Tuñón, les deben "la parte más importante" de su labor. "Gracias por arropar a nuestros seres queridos, sabíamos que sólo teníamos que hacer nuestro trabajo y que aquí toda la comunidad estaba velando por los nuestros", señaló el director técnico. Añadió que, aunque la placa se la llevan ellos, el mérito es "de todos nuestros vecinos. Para nosotros era un alivio saber que madres, mujeres, hijos... que todo el mundo estaba arropado".

De las madres y de las mujeres se acordó también la alcaldesa de Lena, Gema Álvarez (IU), durante su discurso. A ellas las llamó "las sufridoras de la mina, siempre esperan en silencio". "Como Alcaldesa, hablando por todos los lenenses, quiero trasladaos el cariño y el agradecimiento. Porque estos días habéis llevado el nombre de las Cuencas mineras a un alto nivel", destacó la regidora. Y mostró su deseo de que este reconocimiento a la labor de la Brigada sirva para "que el Gobierno central apueste por la minería como no ha apostado hasta ahora".

Un deseo difícil de cumplir, pero el espíritu no se pierde. El acto terminó con el himno de los mineros, "Santa Bárbara Bendita", al acordeón de "David Payares". Con la sonrisa de un miembro de la brigada, Rubén García, mirando la nueva placa: "Habrá que buscar sitiu en la estantería", dijo a sus compañeros, en referencia al lugar en el que guardan los premios en su sede. ¿Que si les hace más ilusión que el "Princesa de Asturias"? (premio para el que tendrán candidatura). Ni eso se les pudo preguntar. No hicieron declaraciones ni antes ni después del acto. Según ellos, son las normas de Hunosa.