Una mujer de 51 años que llevaba desaparecida desde el lunes fue encontrada ayer en el río Caudal. Fue divisada por un agente de la Policía Nacional que transitaba con su coche por la autovía. Inicialmente pensó que se trataba de un animal. Paró el coche y se percató de que era una persona. Se encontraba inerte sobre la pequeña plataforma que se encuentra bajo el puente peatonal de Santa Marina. Las labores de rescate requirieron de la intervención del helicóptero del servicio de emergencias 112. El operativo fue tan espectacular como aparatoso. La mujer, S. S. M., con síntomas de hipotermia pero consciente y estable, fue izada por la grúa de la aeronave ante la presencia de decenas de curiosos.

Guardia Civil, Policía Nacional, Policía Local, Bomberos y sanitarios del 112. El operativo de rescate activado ayer en Mieres colapsó el polígono de Gonzalín y llenó de gente la concurrida senda peatonal del río. La mujer, natural de Candás pero recientemente asentada en Mieres, fue localizaba bajo el puente de Santa Marina sobre la una y media de la tarde. Los primeros en llegar fue una patrulla de la Guardia Civil. Al ver que la mujer no se movía, decidieron de inmediato entrar en el río, aún sin contar con el equipo necesario. Tras recorrer unos 50 metros en medio de las gélidas aguas, llegaron hasta la plataforma en la que se encontraba. Presentaba síntomas de hipotermia y se quejaba de un golpe en una pierna. Una vez establecido que el estado de salud era relativamente aceptable, la prioridad pasó a ser la evacuación de la herida.

Tras tomar el control del rescate, los Bomberos decidieron que para sacar a la mujer del río era necesario movilizar al helicóptero. Alrededor de las dos y media de la tarde apareció la aeronave. Se descolgaron sucesivamente dos rescatadores. Los agentes de la Guardia Civil habían acomodado a la mujer con mantas térmicas y con frecuencia le daban friegas para intentar mantenerla lo más templada posible. Poco antes de las tres de la tarde la mujer fue izada hasta el helicóptero. En ese momento eran varias decenas las personas que se habían acercado hasta el paseo fluvial para seguir de cerca la espectacular maniobra.

S. S. M. fue trasladada al Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA) para ser trata de la hipotermia y ser sometida a un minucioso examen médico. La familia había denunciado su desaparición hacía dos días. La mujer sufre un trastorno mental. A sus rescatadores les comentó que se había caído al río. No obstante, apenas fue capaz de articular frases coherentes. La investigación policial determinará lo sucedido. En principio, las dos hipótesis más plausibles son que S. S. M. decidiera acceder al río por alguna causa extraña o que efectivamente cayera al cauce. La posibilidad de un intento de suicido tampoco se descarta debido a los problemas mentales de la mujer.