El 1 de febrero de 2014 llegaba a Madrid el Tren de la Libertad, una iniciativa que se gestó durante una comida en Pola de Laviana de las integrantes de la Tertulia Feminista "Les Comadres" de Gijón y de "Mujeres por la Igualdad" de Barredos. El 20 de diciembre de 2013, el por aquel entonces ministro de Justicia, Alberto Ruiz-Gallardón, había presentado el proyecto de Ley Orgánica para la Protección de la Vida del Concebido y de los Derechos de la Embarazada, que anulaba el sistema de plazos vigente e imponía una ley de supuestos sumamente restrictiva. El libro "El Tren de la Libertad, las mujeres decidimos" recoge testimonios, fotografías y vivencias de la experiencia que desembocó en una manifestación multitudinaria y que provocó la dimisión del ministro y la paralización del proyecto de ley. El volumen fue presentado en el CIDAN de Pola de Laviana durante un acto que contó con la colaboración del Club LA NUEVA ESPAÑA en las Cuencas.

"El miedo a un retroceso de más de 30 años en la libertad de decisión de las mujeres fue el punto de inflexión que nos animó a dar el paso y recordar así, que tenemos que ser las protagonistas de nuestro cuerpo y nuestra maternidad". Así lo manifestó Jacoba García, concejala de Igualdad del Ayuntamiento de Laviana, antes de dar paso al alcalde, Julio García, que dejó patente su admiración "por unas mujeres que fueron capaces de organizar lo que terminó siendo la mayor manifestación feminista de la historia de España y que plasmó la enorme fuerza que llega a tener la unión de mujeres y hombres comprometidos con la Igualdad". La consejera de Educación, Carmen Suárez, coordinó una obra "que es coral, pues cuenta con muchas aportaciones de quienes vivimos todo el proceso" y recordó durante su intervención que "creíamos que era necesario poner todo lo vivido por escrito, pues lo que no está en el papel no está en el mundo". Suárez dijo que "la experiencia de llegar a Atocha fue única y nos sirvió para darnos cuenta de que hacer de lo local una lucha universal ha sido el gran hito de este tren".

La filósofa Amelia Valcárcel se mostró convencida de que "vencimos porque teníamos razón y luchamos para que la maternidad fuera libre y querida, porque el derecho al aborto no existe, lo que sí tenemos las mujeres es el derecho a que un aborto no sea punible dentro de unos plazos establecidos". Y puso de manifiesto que "cuando no hay agenda y en vez de agenda hay solo batucadas, el feminismo pierde todo su sentido" . También recordó que "aún hay muchas cosas que hacer y es necesario trabajar sobre objetivos que merecen la pena, como por ejemplo, todo lo relacionado con la prostitución".

"En Asturias la lucha por decidir la traíamos en vena y enseguida tuvimos claro que había que hacer algo" aseveró Begoña Piñeiro, presidenta de la Tertulia Feminista "Les Comadres", que trazó un divertido recorrido por las diversas peripecias que vivieron durante la organización y el viaje a Madrid. "Fue una lucha en la que nos sentimos no solo empoderadas sino poderosas, pues tener el apoyo de las trescientas mil personas que salieron a la calle fue todo un hito".

Cerró el acto Maricusa Argüelles, de Mujeres por la Igualdad de Barredos, que mostró su gratitud "a todas las personas que hicieron posible que la iniciativa fuese todo un éxito no solo de las mujeres que estuvimos allí, sino de las que nos precedieron en la lucha y las que nos sucederán".