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El Juzgado embarga las cuentas de Laminados de Aller, que tenían 400 euros

La medida responde a la demanda por despido improcedente presentada por once trabajadores a los que la empresa adeuda 200.000 euros

La nave de Laminados de Aller, en el polígono de Marianes.

El Juzgado ha decretado el embargo de las cuentas de Laminados de Aller tres no hacer efectivo la empresa el pago de las indemnizaciones pactadas tras el despido improcedente de once trabajadores. El plazo para el abono de las cantidades consensuadas en febrero en el Juzgado de los Social de Mieres expiró el lunes de la pasada semana. Los exempleados reclamaron la intervención judicial tras no ver satisfechas las cantidades establecidas, que rondan entre los 15.000 y 20.000 euros por afectado.

Los portavoces de este grupo de once trabajadores explicaron a este diario que pese al embargo siguen sin cobrar: "Se nos ha informado que únicamente tenía unos 400 euros en su cuenta". La compañía les adeuda, en conjunto, en torno a 200.000 euros. Piden que se haga un seguimiento a los movimientos empresariales de la firma para evitar que "pueda, llegado el caso, desviar los ingresos de algún pedido que quede por facturar".

Laminados de Aller mantiene actualmente en plantilla a unos diez empleados. En los últimos meses han salido de la empresa dos tercios de los trabajadores. Los primeros fueron los 11 afectados que ahora reclaman sus indemnizaciones. Aún tienen pendiente un segundo juicio por las nóminas no abonadas. En salarios reclaman 66.0000, que se sumaría a los 200.000 euros pendientes de pago por los despidos.

Estos extrabajadores dejaron la compañía en marzo tras alcanzar un acuerdo con la dirección de la firma en las puertas mismas del Juzgado de los Social de Mieres. La firma accedió a la petición de estos trabajadores minutos antes de que se iniciara el juicio, asumiendo el despido improcedente que reclamaba el grupo. Algunos llevaban en plantilla desde 2008. Se acordó que percibirían 45 días por año trabajado. A la propiedad se le concedieron 45 días para cumplir el mandato. El plazo se amplió posteriormente debido a la crisis sanitaria. Con todo, consumida la prórroga, los trabajadores siguen sin cobrar.

Laminados de Aller, dedicada a la producción de vidrios de automoción en el polígono de Marianes, lleva con regulaciones de empleo desde 2012.

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