El suministro eléctrico en el concejo de Caso ya está restablecido. Los operarios, hasta once cuadrillas distintas, trabajaron a destajo para devolver el fluido energético al concejo, muy afectado durante todos estos años por los apagones en cuanto llega el mal tiempo. Se da la circunstancia de que precisamente en estas fechas se están ejecutando unas obras de renovación de torres y cableado para evitar los cortes de electricidad como el sufrido por la mayor parte de los pueblos casinos durante la jornada de ayer y parte de la madrugada de hoy.

El temporal se está cebando con los pueblos de las Cuencas. Los concejos de Aller, Lena, Laviana, Sobrescobio... Los equipos de los servicios de obras trabajan al máximo de su capacidad. Pero el municipio más afectado con diferencia es el de Caso: ayer se vinieron abajo seis torres de alta tensión que alimentan a distintas zonas del municipio. La electricidad faltó en el concejo, de 1.500 habitantes, desde la mañana, y no fue hasta la madrugada cuando se pudo recuperar el suministro en todos los puntos. El alcalde casín, Miguel Fernández, estaba ayer desesperado: “Es complicado luchar contra lo que nos está cayendo. Tenemos todos los trabajadores y toda la maquinaria de la que disponemos, y poco es lo que podemos hacer”. Por la tarde había hasta 11 equipos de reparación del tendido eléctrico en Caso: “Están dejándose la piel para darnos la corriente”, afirmó el regidor.

Desde las siete de la mañana de ayer hubo “movimiento” en los pueblos del concejo. Ya a esa hora los bomberos tuvieron que dar apoyo a una emergencia médica en La Felguerina. El día amaneció torcido, y así siguió. Como las seis torres que se rompieron, “por la inadecuada tensión y por el peso de la nieve. Se doblaron y los cables se rompieron”, apuntó Fernández. Un equipo quitanieves municipal estuvo todo el día a disposición de las cuadrillas de trabajadores que intentan devolver el suministro, la luz. Se está suministrado con generadores. “Los tenemos en Veneros, Campo de Caso, Orlé, tres en Abantro, y en la zona de Coballes, para alimentar al valle de Caleao”. Un esfuerzo “titánico” que tiene poca recompensa, “tener luz, teléfono, internet. Son cuestiones básicas”. Ayer no se pudo abrir el acceso a cinco pueblos, Tarna, Prieres, Govezanes, Buspriz y Pendones. Hoy se quiere "liberar" un poco a los vecinos de su "cautiverio": hay pueblos con bastante más de un metro de nieve. “Les pedimos perdón, pero no se pudo hacer más, y priorizamos arreglar la luz antes que nada. Es básico”, concluyó el regidor casín.