Las familias que han solicitado y tienen una plaza concedida en la residencia del Montepío en Felechosa están que trinan. Y es que Sanidad tiene bloqueado el ingreso en el geriátrico de una decena de pacientes pese a que según señalan desde la mutualidad, tienen todos los informes favorables para poder entrar en las instalaciones.

Según señalan desde la mutualidad, actualmente tienen a una decena de personas esperando para poder entrar en la residencia allerana. Algunas familias han mostrado su malestar ante un “bloqueo” que no entienden, ya que en sus manos obra toda la documentación necesaria a nivel sanitario para poder dejar allí a sus familiares. En algunos casos, la situación se agrava al tener que hacer numerosos esfuerzos por motivos laborales o personales para poder a tender a sus mayores.

El problema radica en que ahora, para poder entrar en la residencia, no solo se necesita un informe médico, sino también el visto bueno por parte del servicio de Epidemiología del Principado. Y desde que el concejo de Aller entrase, a finales del mes pasado, en la situación de riesgo 4 Plus, no se está autorizando la entrada de estos residentes a pesar, en algunos casos, de ya estar vacunados contra el covid, haber pasado la enfermedad, y tener las PCR negativas. Desde el Montepío reclaman a Sanidad que acelere los trámites necesarios para poder afrontar la llegada de estos nuevos residentes en las máximas condiciones de seguridad.

La de Felechosa es una “rara avis” en lo concerniente a las residencias de mayores, ya que desde que el inicio de la pandemia en España, hace un año, el geriátrico se mantiene como un espacio libre de covid, donde ninguno de sus residentes ni personal han dado positivo en los test. De hecho, en el último cribado realizado, del que se tuvieron ayer los resultados, de nuevo todos dieron negativo.

El protocolo sanitario que siguen para los nuevos ingresos es severo. Además de tener que realizarse una prueba PCR antes de entrar cuyo resultado sea negativo, una vez que el residente accede al geriátrico se le confina durante quince días. Pasado ese plazo se le repite la prueba, y si de nuevo vuelve a estar sano, ya se le permite la movilidad en su área.