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El gobierno de Mieres “busca nuevos espacios” para los perros en el concejo

Los portavoces municipales afirman que desde el Ayuntamiento “no hay ni persecución ni abandono” hacia los perros ni sus dueños

La concentración de ayer en Mieres. A. Velasco

Desde hace unas semanas, la crispación que hay en Mieres en torno a la ordenanza de tenencia de animales aprobada por el gobierno local es latente. A la indignación de los propietarios de las mascotas, siguieron las críticas de grupos de la oposición como PSOE y PP, pero también las muestras de apoyo a las nuevas medidas por parte de asociaciones vecinales. El equipo liderado por Aníbal Vázquez tiene su mensaje meridianamente claro: “No hay ni persecución ni abandono a los perros”.

El gobierno local apuntó ayer que la situación es diametralmente opuesta: “Se están tomando las medidas necesarias para disponer de espacios específicos y garantizar los medios suficientes”. Las fuentes municipales apuntaron que “lo único que se persigue desde el Ayuntamiento es el maltrato animal y es falso que haya multas indiscriminadas por pasear a los perros: al contrario, el número de sanciones sigue siendo muy bajo”. Una afirmación que confronta directamente con la posición de los dueños de mascotas, que acusan a los dirigentes municipales de orquestar una campaña de persecución.

“El reto se llama convivencia porque los derechos de una persona terminan donde comienzan los de los demás y esta es la regla de oro en cualquier sociedad democrática y por eso el Ayuntamiento tiene que proteger el interés general”, apuntaron desde el gobierno local. “Por ejemplo, la seguridad de los niños en las áreas infantiles de los parques públicos o la de cualquier vecino que en los espacios públicos”, prosiguieron las fuentes municipales, para zanjar que “las personas que tienen mascotas tienen derechos pero también tienen obligaciones”.

Desde el gobierno local de Mieres también quisieron tener un recado para el grupo municipal del PP, que se había sumado al carro de la crítica de las últimas medidas para el control de las mascotas tomadas por IU. “El PP hace oposición desde la pataleta o la sobreactuación y se apunta a un bombardeo con tal de buscar un titular que disimule que no tiene más proyecto para el concejo que un folio en blanco que intenta llenar a golpe de ocurrencias”, aseguraron las fuentes.

En este sentido, los portavoces municipales señalaron que “igual se olvidan de que se han habilitado dos espacios específicos y se sigue trabajando en la búsqueda de más recursos y medidas en este sentido”. Además, agregaron que el espíritu de la nueva ordenanza aprobada sobre tenencia de animales, que sustituyó a la una normativa de hace casi tres décadas, “busca blindar la protección animal y castigar como se merece a quien maltrata o incumple con las obligaciones básicas para el cuidado y alimentación de cualquier animal”.

"Lo que busca la ordenanza es dividirnos y criminalizarnos"

Un centenar de personas y, otros tantos perros, se concentraron por tercera vez en el último mes ante el Ayuntamiento de Mieres para protestar contra la nueva ordenanza de tenencia de mascotas, que a su juicio resulta a todas luces inviable. Insistieron en la idea de sentirse perseguidos y de no contar con los recursos y espacios suficientes para poder estar con sus mascotas. Muchos de los manifestantes portaban una camiseta con el lema “Soy de Mieres, tengo perru”, en señal de protesta contra las medidas adoptadas por el Ayuntamiento. “Este equipo de gobierno no tiene la intención de escucharnos sino más bien de dividir a los mierenses en dos: los que amamos a los animales y los que los detestan”, aseguró Liliana Castro, una de las organizadoras de la concentración, que fue la primera en tomar el micrófono para arengar a los asistentes. Esta mierense, que hace unos días intervenía en el Pleno municipal, aseguraba que “lo que exigimos es que nos escuchen, que reflexionen y corrijan esta lesiva ordenanza, que lejos de proteger el bienestar animal, que lo busca es dividirnos, excluirnos y discriminarnos”. Carteles con el lema “Mieres, prohibido perros en todo el concejo, ¿es lo que quieren?”, o “Soy de Mieres, tengo perru... y a mucha honra”, inundaban la plaza consistorial. Mientras se sucedían las intervenciones de otros asistentes a la protesta, otro de los responsables de la misma, Saúl Bardio, aprovechaba para explicar los problemas que se están encontrando en la gestión de otros dos aspectos importantes para ellos: el albergue de animales, y el plan CES para la gestión de colonias de gatos. “Están perdiendo un tiempo precioso mientras se resuelven las alegaciones al último concurso de la gestión del albergue para poder sacar adelante el plan para las colonias de gatos, y también el reglamento para los voluntarios”, indicó. Eran muchos los dueños de perros indignados. Entre ellos, Minerva Losa, que llevaba a sus dos mascotas a la protesta: “Nos parece bastante surrealista que prácticamente no se pueda pisar ningún tipo de zona verde con los animales, y menos en una ciudad como Mieres, que tiene muchísimos perros”. “Que te persigan de esta manera, que no te apoyen, que no te ayuden para que haya una movilidad cívica entre toda la población, me parece fatal”, aseguraba esta joven, que apostillaba: “Creo que se está creando un ambiente muy tóxico, formando bandos, y no me gusta nada eso”.

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