Los “Fíos de Boo” volvieron a reunirse este fin de semana, tras dos años de interrupción por culpa de la pandemia del covid-19. El colectivo unió a 80 personas en una comida que tuvo limitación de aforo y lista de espera. Algunos de ellos se incorporaron al encuentro, muy esperado, una vez terminó la comida. Los “Fíos de Boo” une a personas naturales de esta localidad allerana que están dispersos por toda Asturias y toda España. Un ejemplo de ello es Pablo Lobo, presidente de la entidad, llegado desde Cádiz. También hubo asistentes de Madrid, Barcelona o Valencia. El encuentro comenzó con un pasacalles de gaita y tambor, y siguió con una misa en recuerdo de los socios fallecidos. A continuación llegó la comida de hermandad en el chigre-tienda Casa Terrona.