El colegio de Villapendi de Turón gana alumnos, pero el transporte escolar los deja en tierra

Las familias de los escolares se movilizan para lograr que todos los niños puedan ir al cole en bus, evitando una peligrosa carretera sin aceras

Uno de los niños sin transporte, viendo pasar el autobús con sus compañeros.

Uno de los niños sin transporte, viendo pasar el autobús con sus compañeros.

El Colegio Público de Villapendi, en Turón, consiguió este año un logro importante para un centro de zona rural. Consiguió aumentar sensiblemente su matrícula de alumnos, pero lo que debería ser un momento de positivas expectativas de futuro se ha visto parcialmente estropeado por un problema con el transporte escolar. Varios niños, algunos de apenas 4 años de edad, se ven obligados a acceder caminando al colegio por una carretera bastante empinada y sin aceras. El motivo es que el autobús los deja en tierra pese a que la solución al problema se antoja tan sencilla como hacer una parada más en el recorrido, sin desviarse, y movilizar un vehículo con cuatro plazas adicionales. 

Un padre, llevando a su hijo al colegios caminando.

Un padre, llevando a su hijo al colegios caminando. / LNE

El problema parte de una decisión ya controvertida por sí misma. La Consejería de Educación del Principado de Asturias, dentro de su sección de centros, concretamente el departamento de Transporte Escolar, considera desde hace años al Colegio Público de Villapendi como el centro escolar urbano del valle de Turón. Los motivos que alega para ello son la proximidad del colegio a las casas del pueblo. “Pero no tiene en consideración el tipo de acceso al centro escolar”, apuntan los portavoces de la asociación de padres de alumnos.

Las familias explican que el acceso no es peatonal, ya que no cuenta con aceras. No tiene pasos de cebra ni semáforos. No hay presencia de agentes municipales que regulen las entradas y salidas del alumnado.

La calzada presenta una pendiente muy prolongada y ofrece muy mala visibilidad. “Por no hablar de las heladas que se producen en los meses de invierno”, recalcan los responsables de la comunidad educativa. 

Las familias del centro consideran que “todo esto supone un peligro diario para nuestros hijos, ya que hay alumnos que no pueden hacer uso del transporte escolar porque no hay plazas suficientes para todos”. Según la información que manejan, el Consorcio de Transportes de Asturias tiene contratado un autobús de 19 plazas y en la actualidad, debido al aumento de matrículas, esta cobertura es inferior al número de alumnos que solicitan transporte, “puesto que ahora mismo son 22 los que necesitarían poder subirse a ese autobús”.

Los contactos sin resultado

Después de meses de llamadas e intercambios de correos electrónicos entre el centro y el Consorcio, no solo no han solucionado el problema, “sino que han borrado de un día para otro (en concreto del día 3 al 4 de este mes) del sistema de gestión a los últimos tres alumnos matriculados”. La sorprendente decisión de excluir de un plumazo a los nuevos alumnos ha provocado la indignación e incredulidad entre las familias del centro. “Esta anulación en el sistema se produce casualmente un día después de que la dirección del centro notificase tanto a Consejería como a Consorcio la escasez de plazas”, denuncian los padres.

La solución que plantean en el colegio es sencilla: un autobús más grande. “Se trata de una solución que no implicaría en ningún caso más coste, ni más rutas, ni la contratación de otro chófer o monitora, ni siquiera modificar la ruta”, apunta la asociación de padres. “Simplemente, más plazas”, recalcan. “Para que así todos los alumnos puedan llegar seguros y sin correr riesgos innecesarios a la escuela”.

Las desavenencias con el Consorcio de Transportes de Asturias no son recientes. “Ya el curso pasado no permitió abrir una parada que previamente estaba registrada en el sistema, por lo que dos alumnos de 4 y 9 años eran los únicos niños del centro que veían como el autobús escolar pasaba por delante con el resto de sus compañeros en su interior mientras que ellos tenían que hacer, y siguen haciendo, el trayecto a pie”.

Para que todos los alumnos del centro estén en igualdad de condiciones, las familias piden a Consorcio de Transportes de Asturias y a la Consejería de Educación que el Colegio Público de Villapendi deje de tener una ruta de transporte escolar "de carácter excepcional", “lo que permite las injustas características de esta situación de desigualdad entre el alumnado”. Reclaman que el centro pase a ser considerado con "derecho a transporte escolar gratuito", puesto que “entre el alumnado actualmente matriculado se cumplen todos los requisitos que recoge el BOPA en su resolución del 12 de mayo de 2021, de la Consejería de Educación y de la Consejería de Medio Rural y Cohesión Territorial, por la que se regula la prestación del servicio de transporte escolar para el alumnado de centros docentes públicos no universitarios en el Principado de Asturias”. 

El AMPA del centro ya ha comenzado con la recogida de firmas en internet, en la plataforma change.org.