El partido del Lenense juvenil y el Turón acabó con 14 guardias civiles en el campo pese a la ausencia de incidentes

El club solicitó la presencia de una patrulla en El Sotón para prevenir incidentes al termino del encuentro con el Turón, movilizando el instituto armado a 14 efectivos, sin altercados al final

Últimos instantes del partido entre los juveniles del Turón y del Lenense.

Últimos instantes del partido entre los juveniles del Turón y del Lenense. / Foto cedida por el CD Turón

Las emociones en el fútbol alcanzan en ocasiones tal intensidad que quienes presencian los partidos pueden incluso percibir que los acontecimientos están próximos a descontrolarse. Eso pensó un directivo del Lenense el pasado domingo durante el encuentro de juveniles que enfrentó en el Sotón al equipo local con el del Turón. Ambos equipos se jugaban el ascenso a segunda división. A falta de un minuto para alcanzar el tiempo reglamentario, los turoneses ganaban por 3 goles a 2. En apenas tres enloquecidos minutos el Lenense remontó, generándose en la grada un clima de enfado hacia las decisiones arbitrales y de frustración. El citado directivo decidió llamar a la Guardia Civil para prevenir posibles altercados. En cuestión de minutos, casi tan rápido como se consumó la remontada y ante la sorpresa de todos los presentes, se personaron en el estadio cinco coches patrullas del instituto armado. Al final no se había producido ningún tipo de incidente y, desde luego, nada sucedió a partir de que el campo fuera literalmente tomado por las fuerzas de orden.

«La verdad es que por momentos pareció que llegaba el ejército», apunta quienes estaban en el campo. Un directivo decidió, de manera prudente y sin más objetivo que evitar problemas, llamar a la Guardia Civil al temer que pudiera producirse una invasión de campo al término del partido, un tenso encuentro que acabó con remontada y, por tanto, con los nervios a flor de piel en la grada y sobre el terreno de juego. «Al final no sucedió absolutamente nada», subrayan dirigentes de ambos equipos. «Pensamos que con una patrulla de la Guardia Civil en el campo evitaríamos posibles problemas, pero nunca imaginamos un despliegue de ese tamaño».

Hasta cinco patrullas se personan al tiempo en el Sotón, según los testigos. Los directivos del Turón se vieron tan sorprendidos o más que sus homólogos locales. «Al ser día de elecciones había muchos agentes movilizados y, como no había otro tipo de incidencias en la zona, los mandaron a todos al campo», señalan los portavoces del club turonés, que apuntan que llegaron a contar 14 agentes en el campo. «En la grada no paso nada significativo más allá del descontento con el desarrollo del partido», destacan también los mierenses, que no tienen queja ni del Lenense ni de la Guardia Civil. De hecho, el propio colegiado del encuentro recoge en el acta la ausencia de incidentes.

El acta del colegiado

El árbitro fue informado de la presencia de la Guardia Civil y él mismo los vio en el campo. «Al término del partido y estando ambos equipos en los vestuarios, un miembro de la junta directiva de la SD Lenense me comunica que ha llamado a la Guardia Civil". Los agentes preguntaron al colegiado si necesitaba de sus servicios: «No preciso de asistencia de la fuerza pública dado que no observo incidente alguno entre público, técnicos o incidencias hacia mi persona», observa el acta.

El partido del domingo se recordará mucho tiempo en Lena y Turón, Por un lado, las emociones se desataron sobre el terreno de juego, con una remontada postrera que desató frenesí en las filas locales y el disgusto en el frente visitante, ya molesto desde el inicio por la designación de un árbitro de Lena para dirigir el importante partido de fase de ascenso. La Guardia Civil acudió a la llamada preventivo del equipo de casa, pero lo hizo con un despliegue pocas veces visto en un partido de fútbol base.