Gijón, V. R.

Al igual que sucedió hace cuatro semanas en Cádiz, el Sporting jugará esta tarde en Vitoria obligado a sumar para mantenerse en los puestos de ascenso. Aquel día la Real Sociedad ganó en Málaga y durmió en puestos de ascenso tras adelantar al Sporting. Los de Preciado respondieron con su victoria en el Carranza gracias al golazo de Diego Castro. Un mes después, los rojiblancos han vuelto a dormir fuera de las plazas de privilegio. Málaga y Real Sociedad resolvieron sus salidas a Sevilla (0-1) y Santa Cruz de Tenerife (1-2) respectivamente y obligan al Sporting a sumar en Vitoria. Si ganan, los de Preciado regresarán a la segunda plaza de la clasificación. Un empate les bastaría para mantenerse en puestos de ascenso con los mismos puntos que la Real Sociedad.

Desde muy pronto, ya se vio que la jornada de ayer no sería propicia para los intereses rojiblancos. Martí adelantó a la Real Sociedad a los cuatro minutos de partido. Un cuarto de hora más tarde, también el Málaga se adelantaría en el marcador gracias al tanto de Calleja, que a la postre resultaría definitivo para los de Muñiz.

El Sporting recuperó la esperanza gracias al gol del oviedista Óscar Pérez en el minuto 26 del encuentro. El Tenerife, que ya había estrellado con anterioridad un balón en el poste por mediación de Ayoze, controlaba el encuentro y a ratos parecía que sería capaz de lograr la victoria. Sin más novedad se llegó al descanso en ambos campos.

El Málaga de Muñiz controló sin apuros al Sevilla Atlético durante todo el segundo tiempo y en especial a raíz de la rigurosa expulsión del delantero cedido por Racing de Santander Juanjo. En inferioridad numérica, el filial sevillista apenas inquietó la portería de Goitia. A esas alturas ya estaba claro que difícilmente se producirían novedades en el Sánchez Pizjuán.

Todo lo contrario que en el Heliodoro Rodríguez López, donde el recién incorporado Víctor Casadesús lograba superar al portero tinerfeñista con un acrobático remate cuando sólo quedaban diez minutos. El gol donostiarra descompuso a los locales, que habían sido superiores durante todo el encuentro.

Finalmente, los dos rivales del Sporting sacaron adelante sus compromisos y cargaron de presión a los de Preciado.