Las grandes operaciones llevan su tiempo y así se lo están tomando en el Madrid con los retos que se le presentan este verano. Neymar y Kun Agüero son las dos cartas a las que juega Florentino Pérez para su fichaje galáctico anual. El brasileño tiene aún pendiente la final de la Copa Libertadores, aunque desde Chamartín ya ha llegado una oferta al Santos, su club. En la estrategia de fichajes, el Madrid hace ahora de menos al Kun, en lo que puede ser parte de una táctica de despiste para desgastar al Atlético de Madrid, reacio al traspaso al rival ciudadano. No hay prisa, al fin y al cabo los fichajes deslumbrantes son carreras de fondo que suelen terminar al final del verano. Entre que llega o no la gran estrella, los blancos se han echado encima de una promesa francesa. El defensa central Raphael Varane, que podría llegar por unos 10 millones.
Si se concreta lo de Varane, la salida de Garay, uno de los señalados para partir del club, sería un hecho. El nuevo objetivo madridista está también en la agenda del Manchester, aunque Florentino Pérez parece haber tomado ventaja gracias a la intervención de Zinedine Zidane. Otra posibilidad es que Varane juegue un año más cedido en su país, aunque tendría que ser en un equipo de la máxima categoría, tras el descenso del Lens, donde jugó la última temporada. Aunque ha disputado muchos partidos en el centro del campo, lo que podría ser un punto a favor dentro de la filosofía de Mourinho, Varane es un defensa central que destaca por su corpulencia y altura (1,91 metros), además de una correcta técnica para jugar el balón. De origen caribeño, Varane ya ha sido internacional con la selección sub-21 de Francia. Y en el país galo están convencidos de que su futuro es madridista. Para lo demás habrá que esperar mientras las historias de Neymar y Kun se aderezan con el clásico anecdotario de los fichajes. El jugador del Santos llegó a decir que podría superar a Messi sin necesidad de salir de Brasil. Y por ahí apareció Maradona, compatriota de Leo y suegro del Kun Agüero, el rival de Neymar en la carrera madridista, para frenarle los pies. «Es un maleducado y dudo que alguien pueda mejorar a Messi», dijo.
