El Unión Financiera no logró prolongar en Orense las buenas sensaciones dejadas en los dos últimos partidos, ante Palencia y Lleida, sufriendo ante el Breogán la tercera derrota de la temporada. Los de Carlos Marcos jugaron un partido a "tirones", sin continuidad, y su falta de fortuna en los momentos claves, cuando lograban acercarse en el marcador, inclinó definitivamente la balanza a favor del conjunto lucense.

El partido comenzó bronco, con excesivos contactos y un cuadro local al que su poderío interior le permitió tomar la delantera en el marcador, con un parcial de salida de 10-1; una sangría que el cuadro azul al menos conseguía limitar para, liderados por Fabio Santana, cerrar el primer cuarto con un 20-10.

No hubo reacción por parte de los de Marco en el segundo acto, con el Breogán llegando a tener una ventaja de 16 puntos tras un triple de Iván Cruz. La defensa era una vez más la asignatura pendiente del Unión Financiera, lo que llevó a Marco a dar entrada en el minuto 15 a Hernández-Sonseca, que debutaba así con el conjunto carbayón.

Tras el descanso (47-35) el Breogán repetía los 16 puntos de ventaja (53-37). El cuadro ovetense cerró entonces la línea defensiva y, más enchufado, fue recortando la diferencia hasta EL 54-47 tras sendos triples de Dani Pérez y Löfberg; margen que se mantendría al cierre del tercer parcial (61-54).

El choque, entonces, entró en una especia de montaña rusa. El Breogán se escapaba (71-56) y el Unión Financiera reaccionaba (7-65), pero cuando parecía que los de Carles Marco podían dar alcance a su rival fue el cuadro lucense quien volvía a distanciarse hasta el 95-78 con el que finalizó el partido.

Miquel Salvó (11 puntos y 8 rebotes) fue el más valorado del cuadro asturiano, y Hernández-Sonseca debutaba con 10 puntos aunque sin aportación en el rebote.

El martes vuelve a haber jornada de liga, la octava, con el Unión Financiera recibiendo en Pumarín al Magia Huesca (20.435 horas).