El Caudal Deportivo nada en un mar de dudas. A la complicada situación deportiva de un equipo que es colista del grupo II de Segunda División B y que acumula más de una vuelta sin ganar se une que el próximo 14 de marzo el club entrará en proceso electoral a la presidencia. Unas elecciones a las que no se presentará a la reelección el actual máximo mandatario, Roberto Ardura, que cumple su octavo año de mandato, dejando al club en plan incertidumbre y a la espera de posibles candidatos a afrontar el reto de dirigir al club más representativo de la Cuenca del Caudal.

El año 2018 es uno de los más importantes de la historia caudalista. El equipo mierense cumplirá el próximo mes de julio su centenario pero, a día de hoy, el futuro de la entidad atraviesa una importante indefinición tanto deportivamente como institucionalmente. El equipo blanquinegro cumplirá cien años pero el apartado deportivo no es nada halagüeño. El plantel blanquinegro es el colista del grupo con sólo quince puntos sumados en veintisiete jornadas. La salvación está para los de Josu Uribe a trece puntos y la plaza de promoción a diez. La directiva ha tratado de reactivar al plantel con la llegada del experimentado Josu Uribe tras la dimisión de Paco Fernández además de remodelar el plantel con diez bajas y nueve fichajes pero la realidad es que el Caudal acumula ya cinco meses sin ganar y las jornadas pasan sin reacción.

A esta complicada situación deportiva se une otra que es la incertidumbre institucional. El próximo 14 de marzo el Caudal Deportivo iniciará el proceso electoral para renovar la presidencia. Un proceso en al que Roberto Ardura no se presentará a la reelección, pero el actual presidente de la entidad blanquinegra avisó que "no queremos dar por concluida la temporada. Llamémoslo milagro o épica pero no pienso en Tercera División sino en Segunda B. Tengo fe en que nos salvaremos. Si comenzamos este proceso ahora es porque no vamos a seguir al frente del club y creemos que lo mejor es que la directiva entrante tenga tiempo de sobra para confeccionar el equipo de la temporada que viene". Estas declaraciones del máximo mandatario ponen en alerta a los más de quinientos socios de un equipo mierense que se enfrentará en el año de su centenario a un proceso electoral clave para el devenir del club sin que se auguren posibles candidatos a suceder a Ardura.

El próximo 14 de marzo se celebrará una asamblea extraordinaria en la que el único punto del día será la convocatoria de elecciones que serían el 22 de abril coincidiendo con la visita del Athletic B al Hermanos Antuña con el club en el limbo.