"Se nos escaparon vivos". Es la conclusión de Óscar Martínez, el entrenador del Ovida Bádminton Oviedo, a la hora de valorar el resultado (3-4) del encuentro de ida de la final de División de Honor frente al Recreativo La Orden de Huelva. Martínez tiene dos semanas para preparar la remontada y conseguir el 6 de abril el segundo título de la historia del club ovetense.

Óscar Martínez cree que lo pueden hacer: "Si lo conseguimos en 2015, cuando veníamos con un 5-2 en contra de la ida, por qué no lo vamos a hacer ahora". Hace cuatro años, el ahora entrenador contribuyó a la remontada en el Corredoria Arena. Esta vez será a domicilio, aunque con un resultado más ajustado: "La final se puede decidir por detalles, como ocurrió en el encuentro del sábado".

Detalles como los que decantaron el partido que abría la eliminatoria, el dobles mixto: "Fue muy importante. Se nos escapó el punto después de tener un 20-17 en el primer set y un 15-10 en el segundo. Pudimos salir de los dobles con un 3-0". Pero no fue así y, tal como preveía el entrenador, los individuales decantaron la balanza para los onubenses. "En el femenino tuvimos opciones, así que allí habrá que pelearlo".

Pese a que el Recreativo La Orden tiene un equipo más experimentado y que se prevé una entrada con más de dos mil personas en su pabellón, Óscar Martínez está seguro de que sus jugadores no se arrugarán: "La cancha y el ambiente influyen, pero lo importante es prepararse bien e ir con las ideas claras".

El técnico elogia a la afición que convirtió el Corredoria Arena en una caldera, "un ambiente mejor incluso que el de 2015", y espera tener también apoyo en la vuelta: "El club se está planteando contratar un autobús para que los aficionados acompañen al equipo. Iremos con tiempo para descansar y entrenar un poco por la mañana".