El protocolo para la reanudación de las competiciones de ámbito estatal no profesionales incluye la recomendación del Consejo Superior de Deportes (CSD) de pruebas específicas previas de covid-19 para los deportistas, y la opción de que las federaciones descalifiquen por su incumplimiento. Estas pruebas no tendrán que realizarse en las horas previas a cada partido sino antes de comenzar la pretemporada y en su defecto 72 horas antes del inicio de la temporada. La decisión de si se deberán hacer más pruebas se determinará con posterioridad conforme a criterios sanitarios y en coordinación con las Comunidades Autónomas.

El documento permite a las federaciones dotarse también de un "protocolo propio de refuerzo" que validará el CSD e incluye numerosas reglas tanto para entrenamientos como para competiciones; así como los requisitos que deben cumplir las instalaciones, los desplazamientos y alojamientos de deportistas y del resto de personas relacionadas. También incluye la recomendación del CSD sobre un aforo de 500 personas en recintos cerrados, y de 1.000 si son al aire libre.

La vigencia estará condicionada por la evolución de la pandemia. El protocolo también precisa cómo actuar en caso de registrarse positivos y situaciones de contagio, de forma que las federaciones podrán sancionar por no cumplirlo.