Fiel a su cita, la 39 edición de la San Silvestre Ciudad de Oviedo volverá a juntar a todos los corredores que quieran despedir el año disputando una de las pruebas más importantes del año. La prueba tendrá el mismo recorrido que el año pasado y contará con cinco mil inscripciones para la categoría adulta y 1500 para lo más jóvenes. Además, al igual que el año pasado, se disputará una carrera inclusiva.

“La San Silvestre vuelve con todo su esplendor y con total normalidad, que es lo que todos queríamos recuperar”, comentó Conchita Méndez, concejala de Deportes del Ayuntamiento de Oviedo. La edil confirmó que, como se hizo en la edición covid, este año también habrá carrera virtual para todos aquellos que estén fuera o se queden sin su inscripción. “Toda la recaudación de la prueba irá destinada a la Asociación Galván”, dijo Méndez, muestra de la actitud solidaria de esta carrera.

Óscar Piniella, organizador se la carrera, mostró su agradecimiento tanto al Ayuntamiento como a los organizadores, y dejó un aviso. “Ojo que los dorsales vuelan”, confesó. “Esperamos, como en otras ediciones, contar con los mejores atletas asturianos. Ya he hablado con algunos y todos tienen ganas de venir”, indicó Piniella, que tiene claro cuál es el objetivo de la prueba. “Queremos hacer felices a las personas, aquí cabe todo el mundo”, destacó.

“Nosotros buscamos que las personas con capacidades diferentes puedan participar en eventos deportivos y esta prueba es ideal para ello”, afirmó Miguel Cuesta, miembro de la Comisión de Deporte Inclusivo de Asturias. El año pasado la prueba inclusiva ya tuvo cabida dentro del programa habitual y este año, viendo el éxito que cosechó, repite. "Desde aquí queiro animar a todo el mundo a que se apunte”, finalizó Cuesta.