Oviedo, Javier CUARTAS

La compañía asturiana General de Alquiler de Maquinaria (GAM) completó con éxito la ampliación de capital que, por un monto superior a los 39,64 millones de euros, había puesto en marcha en febrero para reforzar su balance y para impulsar su proyecto de expansión internacional, fundamentalmente en Latinoamérica y Oriente Medio, donde aspira a convertirse en el operador de referencia en el sector del alquiler de maquinaria. Con esta operación, GAM, líder del sector en España y Portugal, y que cotiza en Bolsa, ha ampliado el número de sus acciones en un 48,62%.

Con esta inyección de recursos GAM prevé reducir su deuda de los 543,4 millones actuales hasta el entorno de los 500 millones.

En el período de suscripción preferente, que culminó el pasado día 9, se adquirieron algo más de 14,94 millones de títulos, equivalentes al 99,88% de la ampliación. Los 17.776 títulos restantes que quedaron sin suscribir en la primera fase fueron adjudicados sin dificultad, mediante prorrateo, entre los accionistas, que habían cursado peticiones por un monto total de 29,77 millones de acciones, equivalente al 199% de la ampliación.

La compañía, fundada y presidida por el empresario ovetense Pedro Luis Fernández, principal inversor de GAM, expresó su «satisfacción» por la colocación y consideró un «éxito» y una demostración del «compromiso de sus accionistas» que la sociedad hubiese recibido «tres peticiones para cada nueva acción a emitir». GAM, que opera con 60.000 equipos y un centenar de delegaciones en España, Portugal, varios países del Este, Latinoamérica y Golfo Pérsico, alquila maquinaria para diversos sectores.

La colocación de la ampliación se produce tras un ejercicio en el que la compañía incurrió en «números rojos» (perdió 8,9 millones en 2009, frente a un beneficio de 13,6 millones en 2008), lo que se interpreta como demostración de la confianza de los accionistas en las posibilidades de la empresa tanto en el mercado nacional (a medida que se recupere la demanda) como en su expansión por áreas geográficas menos castigadas por la recesión internacional, caso de Oriente Próximo y Latinoamérica. En 2009 la empresa redujo su facturación el 25% (tuvo ingresos por valor de 277,8 millones), pero aumentó el 7% las ventas en sectores nuevos e incrementó el 27,7% los ingresos procedentes de sus filiales internacionales. La deuda neta de la compañía se redujo el año pasado en 68 millones (hasta los 543,4 millones) y recortó gastos en el 12%.