La fusión de BBVA y Sabadell: una operación que crearía el primer banco del mercado español y que afecta a miles de asturianos

Ambas entidades juntas suman más oficinas bancarias en la región que cualquier otro banco, así como miles de clientes y centenares de empleos

Los sindicatos advierten que pelearán por mantener los puestos de trabajo y "salidas voluntarias si se producen excedentes" y que se garantice la presencia física de las sucursales

La fusión de BBVA y Sabadell: una operación que crearía el primer banco del mercado español y que afecta a miles de asturianos / Amor Domínguez

A. S. / P. A. / P. T.

La salida a la luz de la intención del BBVA de negociar una fusión -por segunda vez y tras un intento fallido hace tres años y medio- con el Sabadell ha sacudido este martes el sector bancario y el mercado bursátil español. Aunque se trata de una fase muy incipiente de la operación, y con un precedente que acabo abortándose por la falta de acuerdo, el movimiento es de tal envergadura que ha generado multitud de reacciones en diversos ámbitos.

No en vano, la fusión entre BBVA y el banco Sabadell crearía la primera entidad bancaria dentro del mercado español, y la segunda entidad bancaria española si ampliamos el escenario a nivel mundial, únicamente por detrás del Santander. Pero aún queda mucho camino por andar y no hay que olvidarse del antecedente del 2020. ¿Y qué se recuerda de la experiencia fallida de entonces? Básicamente que, como en toda operación de este tipo, la cuestión clave es el precio (además del reparto de poder). Si se sigue el modelo de las negociaciones de 2020 y de lo que es habitual en el sector bancario, se instrumentaría mediante un intercambio de acciones, con lo que es fundamental la valoración del Sabadell que proponga el BBVA. Hace tres años, cuando el banco de origen catalán atravesaba un mal momento, el grupo de origen vasco realizó una valoración considerada inaceptable por el Sabadell y las negociaciones se rompieron, según algunas fuentes por una diferencia de en torno a 200 millones de euros. La cuestión es que el Sabadell, que ahora tiene su sede en Alicante, ahora está mucho más fuerte:  vale casi cuatro veces más en bolsa que durante las últimas negociaciones y prevé marcar un récord de beneficios este 2024. Está por ver cuánto está dispuesto el BBVA a subir su apuesta.

El caso es que lo que está en ciernes no es precisamente de poca envergadura. Si la operación saliese finalmente adelante, algo que se puede retrasar varios meses, la suma de los bancos daría lugar a una entidad con algo más de un billón de euros en activos totales (antes de los ajustes propios de este tipo de operaciones) y unos 626.000 millones de activos en España. El nuevo banco, así, podría superar por poco a CaixaBank (613.457 millones de activos totales) como primera entidad del mercado español, además de al Santander (468.807 millones en el país, frente a los 452.227 millones del BBVA).

Asimismo, recortaría posiciones respecto al Santander como primer banco español (tiene 1,8 billones en activos totales, frente a los 801.690 millones del BBVA) y podría competir por ser el tercero de Europa tras el francés BNP Paribas y el propio Santander. Por balance, el Sabadell supondría en torno al 22,7% de la nueva entidad resultante.

La fusión en Asturias

Y si se desciende hasta el nivel regional, la operación tendría muchas implicaciones en Asturias, donde el banco Sabadell -que adquirió en su día el antiguo Herrero- goza de una amplia implantación, que se sumaría al despliegue en la región del BBVA. Siempre sin tener en cuenta posibles ajustes derivados de la fusión, ambas entidades juntas suman más oficinas bancarias en Asturias que los otros bancos. Asimismo, la operación afectaría de manera directa a miles de asturianos. Por un lado, a los clientes, varios miles en el Principado. Y, por otro, a los empleados en la región de ambas entidades, que se cuentan por centenares y superan ampliamente el medio millar.

Algunos sindicatos, de hecho, ya han movido ficha tras conocer la noticia. Es el caso de CC OO, cuyas secciones sindicales de Sabadell y BBVA ya han manifestado que trabajarán conjuntamente para defender que el proceso tenga "garantías suficientes". En este sentido, el sindicato se marca varios objetivos clave: "garantías de empleo, salidas voluntarias si se plantean excedentes, preservación y mejora de las condiciones salariales y laborales, y un proyecto de empresa de viabilidad futura". Igualmente, exigen que una hipotética fusión "no agudice aún más los problemas derivados de la concentración, exclusión y falta de competencia, con condiciones que garanticen la presencia física de redes (oficinas bancarias), dotaciones adecuadas de plantillas y que los servicios digitalizados no excluyan a clientes especialmente vulnerables".

Asturias ya ha vivido recientemente un proceso similar con la fusión entre Unicaja y Liberbank (antigua Cajastur). Precisamente, en este caso también hubo un primer intento de proceso fallido por la falta de acuerdo en el valor de las acciones, pero a la segunda fue la vencida y ambas entidades culminaron su unificación.