Oviedo, José Luis SALINAS
Red Eléctrica de España (REE) logró terminar ayer las reparaciones de la torreta de alta tensión de la línea Soto-La Robla que se había averiado hace seis días. Desde entonces la región había estado conectada a la red eléctrica española por una sola línea, la que discurre entre Lada y La Robla. La empresa inició la reparación el sábado, pero el mal tiempo, las dificultades para acceder al lugar por el que traza el tendido y, por último, la avería de una de las máquinas que se estaba usando para realizar los trabajos demoraron el fin de las obras.
En torno a las cinco de la tarde de ayer los técnicos de la compañía volvieron a enganchar la línea al sistema. Para conseguir finalizar los trabajos, los operarios de la empresa tuvieron que echar mano de dos vehículos oruga de la estación de esquí de Valgrande-Pajares.
El tendido, de 400 kilovoltios y uno de los dos de gran capacidad que conectan Asturias con la red eléctrica, se averió el pasado martes debido a la acumulación de hielo sobre los cables, tras una intensa nevada. La torreta se encuentra situada en una zona de alta montaña, a unos 1.800 metros de altura, justo en la divisoria entre Asturias y León.
Carlos González Patiño, delegado para la zona Noroeste de REE, explicó que para completar las reparaciones resultó muy importante el apoyo aportado por los trabajadores de la estación de Valgrande-Pajares y de la unidad militar de emergencia (UME). El dispositivo desplegado en el lugar de la avería estaba formado por 30 personas.
REE hizo el primer intento de reparar la línea el sábado, pero el exceso de nieve y el viento impidieron realizar los trabajos. La compañía sólo pudo acercar los materiales necesarios para completar la reparación hasta la zona. El domingo las condiciones meteorológicas mejoraron, pero la avería de un vehículo oruga que se estaba utilizando como contrapeso para sujetar la torre y tensar el cable obligó a suspender las obras. Durante la jornada de ayer, según explicó Patiño, se aceleraron mucho los trabajos ante la perspectiva de que el tiempo pudiera empeorar en las próximas horas.
