Los acreedores inyectarán hasta 1.800 millones y tendrán el 95% de Abengoa

Abengoa ha llegado a un acuerdo con sus principales acreedores -banca y bonistas- para reestructurar la compañía. Inyectarán entre 1.500 y 1.800 millones de euros y al final del proceso tendrán el 95% del capital de la compañía frente al 5% de los actuales accionistas.

A este acuerdo -en el que están representados el 40 % de los acreedores- deberán sumarse hasta un 75% de los prestamistas de la firma antes del 28 de marzo, fecha límite para evitar el que habría sido el mayor concurso de acreedores de la historia de España.

La operación se articula en varias líneas. Por un lado, una nueva inyección de capital de hasta 1.800 millones por un plazo máximo de 5 años y que dará derecho a los acreedores a recibir un 55 % del capital de Abengoa. Dicha financiación estaría garantizada con determinados activos, incluyendo acciones libres de Atlántica Yield, la antigua Abengoa Yield que cotiza en Estados Unidos. En paralelo, se capitalizará, es decir pasará a manos de los acreedores, el 70% del valor nominal de la deuda antigua, lo que dará derecho a suscribir un 35 % del nuevo capital. Junto a esto, se refinanciarán 231 millones de euros de deuda de 2014 que se extenderán por dos años y que estará garantizada con las acciones de Atlántica Yield.

El documento añade además la necesidad de 800 millones de avales y, para ello, plantea un aumento del capital. Con todo ello, al término del proceso de reestructuración, los actuales accionistas de la sociedad, entre los ellos la familia Benjumea, ostentarían una participación de sólo 5% en el capital social.

Los sindicatos reclamaron ayer reuniones para conocer "la letra pequeña" del preacuerdo, que la Asociación de Proveedores y Subcontratistas de Abengoa consideró "positivo". Los títulos de Abengoa cayeron un 17% en la sesión bursátil de ayer. Las acciones ya habían visto anteayer frenada su tendencia alcista de los últimos días, que le habían llevado a revalorizarse un 145%.