El Ministerio de Industria, Comercio y Turismo aprobó ayer un régimen por el que la aplicación del nuevo protocolo de medición de emisiones WLTP, que oficialmente entra en vigor mañana, se aplicará en España mediante un régimen transitorio hasta el 31 de diciembre de 2020 para permitir al sector adaptarse. La nueva norma antipolución, más exigente que la hasta ahora en vigente, supondrá que algunos modelos que hasta ahora estaban eximidos de pagar el impuesto de matriculación por sus bajas emisiones, deberán tributar por esta figura impositiva cuando el nuevo protocolo esté plenamente activa. Con esta medida, no se exime a ningún vehículo de cumplir con las emisiones establecidas en la nueva homologación, aunque con la aplicación del índice transitorio "se gradúa el impacto fiscal del cambio de procedimiento y se promueve la renovación del parque móvil", dijo Industria. Las patronales de vendedores de automóviles (Ganvam) y de fabricantes (Anfac) celebraron la decisión pero pidieron un "acuerdo estratégico" para el sector y no "un parche".