Las claves del acuerdo entre patronal y sindicatos para subir los salarios al menos el 10% hasta 2025

El pacto contempla incrementos del 4% para 2023 y del 3% para cada uno de los dos años siguientes | En Asturias los sueldos por convenio estaban creciendo el 3,08%

El presidente de la CEOE, Antonio Garamendi (derecha), conversa con el secretario general de UGT, Pepe Álvarez (izquierda) y el de CCOO, Unai Sordo (centro).

El presidente de la CEOE, Antonio Garamendi (derecha), conversa con el secretario general de UGT, Pepe Álvarez (izquierda) y el de CCOO, Unai Sordo (centro). / AGENCIAS

G. Ubieto / P. Castaño

Patronal y sindicatos han alcanzado un principio de acuerdo para que los salarios suban al menos un 10% de manera acumulada durante los tres próximos años. Los agentes sociales han logrado cerrar un pacto, tras semanas de discretas negociaciones, para guiar la negociación colectiva hasta el 2025. El acuerdo contempla incrementos del 4% para este 2023 y del 3% para 2024 y 2025, respectivamente, según varias fuentes de la negociación. En Asturias, los incrementos medios de los salarios fijados por convenio son en estos momentos del 3,08%, según datos del Ministerio de Trabajo al cierre del mes de marzo.

El acuerdo, que deberá ser ratificado por los máximos órganos de dirección de los agentes sociales la semana que viene, incorpora un incremento adicional del 1%, dependiendo de la evolución del IPC. Según detallan fuentes conocedoras de los entresijos, si el IPC cierra este año por encima del 4%, los sueldos deberán subir el 5%. Y si en 2024 y en 2025 el IPC cierra por encima del 4%, deberán subir un 4%.

La CEOE, CC OO y UGT han sellado las bases del Acuerdo para el Empleo y la Negociación Colectiva (AENC), una especie de "convenio de convenios". Los porcentajes de incrementos pactados no son obligatorios, pero sirven de referencia y todas las organizaciones firmantes se comprometen a aplicarlos.

Según los actuales baremos de la inflación (4,1% en abril) y de cumplirse sectorialmente el acuerdo, las bases pactadas entre los agentes sociales permitirían salvaguardar el poder adquisitivo de los trabajadores, si bien estos vienen de una severa devaluación de salarios reales durante el 2022, la mayor en cuatro décadas. El contenido consensuado no incluye fórmulas retroactivas, según detallan fuentes de la negociación.

¿Cómo funciona el AENC? Por ejemplo, a partir de ahora cuando patronal y sindicatos se sienten para consensuar un convenio, las dos partes se comprometen a aplicar un incremento salarial del 4% para este año. No es obligatorio por ley y ambas partes pueden acordar mayores o menores incrementos, pero esa cifra les sirve de referencia en caso de no entendimiento.

El 5 de mayo del 2022 los agentes sociales daban por rotas las negociaciones ante la imposibilidad de alcanzar un acuerdo satisfactorio para ambas partes. Casualidad o no, el 5 de mayo del 2023 esos mismos actores logran rubricar un principio de acuerdo. Un año exacto ha estado en barbecho el AENC y los convenios que se han renovado durante esos 365 días han obedecido a la correlación de fuerzas de cada sector. En aquellos donde los sindicatos tenían más músculo, las subidas salariales han sido mayores y en aquellos donde apenas están organizados, menores. En Asturias, la subida media al cierre de marzo era del 3,08%, por encima de la nacional del 3,06%.

Patronal y sindicatos logran pactar un marco de estabilidad en sus relaciones y desactivan así la amenaza de conflicto que habían escenificado las centrales en este reciente Primero de Mayo. Desde el Gobierno también llevan meses reclamando a los agentes sociales un pacto.

Las cesiones

El acuerdo llega tras renuncias de ambas partes. La CEOE rechazaba cualquier vinculación de salarios con la inflación, lo que provocó que el año pasado la negociación se rompiera. Y ahora acepta asumir un punto adicional cada año de subida salarial dependiendo de cuanto suba el IPC, lo que obligará a las empresas a provisionar fondos por si los precios suben más de lo pactado. Y la parte sindical ha moderado su posición. Su primera línea roja era que todos los convenios tuvieran cláusula de revisión salarial, es decir, que al margen de la cuantía de incremento base que pactaran, a final de año las empresas debían equiparar sueldos a precios. De ahí se movieron a una propuesta mixta (incrementos adicionales dependiendo en parte de precios y en parte de beneficios del sector) y han acabado aceptando una cláusula de revisión parcial.

"Todo el mundo era consciente de que el tiempo se acababa. Este año hay que acordar 1.400 convenios y que hubiera una mesa abierta ralentizaba las negociaciones. Por eso es una gran noticia", señaló ayer Pepe Álvarez, secretario general de UGT, en Oviedo.

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