La número dos del PSOE al Congreso por Asturias y ministra de Sanidad en funciones, Luisa Carcedo, y la secretaria de organización de la Federación Socialista Asturiana (FSA), Gimena Llamedo, hicieron ayer un llamamiento a la participación y alertaron del peligro que entrañaría una caída en la participación ante la cita del 10N. "El voto nos iguala a todos, es el patrimonio de la gente que tiene en la gestión pública los pilares de una sociedad con futuro para sus hijos y nietos", declaró la ministra Carcedo en la rueda de prensa con la que los socialistas asturianos abrieron ayer la campaña.
"Tenemos el lamentable privilegio de que España sea líder en desigualdad en Europa", señaló Carcedo, quien también habló de la necesidad de cambiar el modelo productivo. Un escenario para el que Asturias "una comunidad eminentemente industrial" se encuentra, a su juicio, "en una situación inmejorable tras haber superado anteriormente una reconversión en el acero y el carbón". La Ministra rechazó un posible viraje de Pablo Casado al centro en esta cita electoral: "Hablar más bajo y mas lento no es ser más moderado", declaró. Gimena Llamedo, por su parte, pidió que nadie se quede en caso el 10N. "Hay que ganar a la abstención para que Abascal no sea el próximo vicepresidente del Gobierno. No podemos dejar el país en manos de los herederos de Franco".
