El presidente Rajoy inauguró ayer la Oficina de Recuperación y Gestión de Activos, que, según subrayó, hará que ningún delincuente, especialmente los relacionados con la corrupción, pueda disfrutar de lo que ha robado gracias su actividad delictiva. Rajoy resaltó que la Oficina disminuirá los costes derivados de la gestión de los bienes embargados y decomisados, que suelen estar mucho tiempo almacenados.