La actriz Michelle Pfeiffer interpreta a una vieja obsesionada con rejuvenecer y conseguir unos buenos pechos en su última película, «Stardust». Pfeiffer tuvo que mantener unas «incómodas» conversaciones con los productores del filme sobre el tamaño y la caída de sus pechos. «Teníamos reuniones y reuniones sobre la talla de mis pechos, sobre lo caídos y pellejos que deberían estar; fue un poco raro», confesó la actriz.

Este papel critica la obsesión actual por la belleza y la juventud. «Es algo que afecta a muchas personas; incluso los hombres han caído en ello, pero es peor para las mujeres», dijo Pfeiffer.