La dueña de un quiosco de El Llano denuncia dos robos con intimidación

R. GARCÍA

Tres presuntos delincuentes hicieron pasar un mal momento a una quiosquera que tiene su negocio en el barrio de El Llano. Ahora deberán pagar por ello en dos procesos judiciales que la dueña del establecimiento ha abierto contra ellos. Uno en la Sala de lo Penal número 3 de Gijón y otro en la Sección Octava de la Audiencia Provincial, con sede en la ciudad.

La vista oral del primer proceso se debería haber celebrado el pasado martes, pero el acusado, D. B. B., no se presentó en los juzgados. El juez ha decretado una orden de búsqueda. La Audiencia Provincial, por su parte, acogerá el segundo proceso en el que están implicados otros dos jóvenes y que tendrá lugar la próxima semana, el día 8.

El primero de los casos que se juzga tuvo lugar en el año 2005. Dos jóvenes, F. J. F. L. y F. G. G., se enfrentan a nueve y ocho años de prisión, respectivamente, por los delitos de amenazas, detención ilegal y robo con intimidación.

El escrito que el ministerio fiscal emitió antes de la vista oral recoge que ambos acusados entraron en el quiosco situado en la calle Pérez de Ayala y amenazaron a su dependienta. Exigían que les pagara una deuda que, supuestamente, había contraído con ellos el hijo de la propietaria. Después de las amenazas consiguieron llevarse 150 euros de la caja registradora del local. La dueña se encontraba temerosa, puesto que los asaltantes aseguraban que si no accedía a sus peticiones de dinero, destrozarían el mobiliario del establecimiento. La vista oral de este primer proceso tendrá lugar la próxima semana, el día 8, en la Sala Octava de la Audiencia Provincial, con sede en Gijón.

El segundo proceso será en el Juzgado de lo penal número 3. En esta ocasión, solamente hay un acusado, D. B. B. Según la acusación, en 2006 entró en el quiosco de El Llano con la intención de robar. El fiscal y la acusación particular presente en el proceso judicial aseguran que el acusado puso una «navaja en el cuello de la propietaria». Quería llevarse dinero de la recaudación y lo consiguió. Al menos pudo robar 550 euros que la dueña tenía en la caja registradora. En este caso, no era la primera vez que el acusado cometía un delito. En el escrito del fiscal también se recoge que el acusado cuenta con antecedentes policiales por un delito de atentado.

Ahora, por haber entrado a robar en el quiosco y por haber cometido un delito de amenazas, D. B. B. se enfrenta a una pena de cuatro años de prisión. La vista oral del juicio tendría que haberse llevado a cabo el pasado martes, pero el proceso no se pudo completar. El acusado no se presentó en los juzgados, por lo que el juez encargado del caso ha solicitado que se le ponga una orden de búsqueda para localizarle y poder desarrollar el proceso penal correspondiente.