Diez mil vecinos de parte del Polígono de Pumarín están llamados a estrenar en Gijón el uso del quinto contenedor de basura: el contenedor marrón para la recogida selectiva de materia orgánica. Un espacio donde irán los restos de verdura, fruta, carne, pescado, comida cocinada, bollería, cáscaras de huevo, posos de café, frutos secos, tapones de corcho, cerillas... para luego ser convertidos en Cogersa en compost o biogás. Un elemento más para el reciclaje tras la implantación de los contenedores de vidrio (verde), envases (amarillo) y papel (azul).

La Empresa Municipal de Servicios de Medio Ambiente Urbano (Emulsa) colocará el próximo mes 45 de esos nuevos contenedores en el barrio dentro de un programa piloto al que se han vinculado también los ayuntamientos de Avilés, Cabranes, Cangas del Narcea, Castrillón, Castropol, Grado, Llanes y Mieres. Así lo anunciaron ayer el presidente y la gerente de la empresa, Fernando Couto y Pilar Vázquez, respectivamente.

La experiencia se centra en el área delimitada por las calles Carlos Marx y Puerto de Vegarada y las avenidas de Portugal y de la Constitución donde viven 3.345 familias (unos 10.036 habitantes). Ellos son los llamados a participar en este experimento que tiene un carácter absolutamente voluntario. Quienes opten por involucrarse en la iniciativa recibirán al inscribirse un pequeño cubo marrón para sus casas y un imán de nevera con el tipo de residuos que van al contenedor marrón. Habrá contenedores de un mayor tamaño para los comerciantes. En cuanto a los depósitos marrones de la calle sólo podrán ser accesibles para los participantes en la experiencia piloto al tener un sistema especial de apertura al que se accede mediante la tarjeta ciudadana del Ayuntamiento.

En esas calles del Polígono de Pumarín, Emulsa recogerá los residuos del contenedor marrón en las noches de los domingos, martes y jueves para llevarlos a Cogersa donde serán reciclados en compost o biogás. Los tradicionales contenedores de recogida no selectiva de residuos se recogerán en las noches de lunes, miércoles y viernes. Emulsa tiene cuantificada en esa zona una recogida de residuos de 3.400 toneladas al año, de las un 42% corresponde con materia orgánica susceptible de ser reciclable. Las expectativas con las que arranca el proyecto son contar con el apoyo del 35% de las familias potenciales (lo que supondría llegar a 1.100 hogares) y recoger 400 toneladas al año de ese material reciclable.