La Agrupación de Afectados por Volkswagen es una asociación de 12 despachos de abogados contra el fraude de las emisiones de Volkswagen, a la que la Audiencia Nacional ha encomendado centralizar en una única demanda colectiva a todos los damnificados. El abogado gijonés Alberto Rey es el vicepresidente de una entidad que a día de hoy representa a unos 3.000 afectados de toda España, con el objetivo de sumar al máximo número posible de los 700.000 propietarios en nuestro país de un coche "trucado" para ocultar la emisión de contaminantes.
- ¿Cómo ha evolucionado el escándalo de las emisiones en los últimos meses?
-Por hacer un poco de historia, el tema de Volkswagen saltó en 2015. Para poder entrar en el mercado estadounidense, la marca encargó al responsable de desarrollo de los motores diésel que intentara competir con otras marcas en ese mercado. Como no consiguió el objetivo, tal y como hemos sabido ahora, lo que encargó fue un software pirata para engañar a los institutos de homologación estadounidense, de manera que en el banco de pruebas el coche daba una emisión de gases menor a la que da rodando en carretera. Todos en la empresa la sabían, no era un secreto. En septiembre de 2015 saltó el escándalo, con emisiones en óxidos nitrosos cuatro veces más altas de lo que declaraban. En Estados Unidos hubo un conflicto enorme y al final llegaron a un acuerdo económico para evitar penas de cárcel, con 5.000 dólares por afectado, sin juicio ni nada, y además la opción de devolver el coche al concesionario, que estaría obligado a recomprarlo al precio del mercado. Ese es el objetivo que tendríamos que buscar aquí.
- ¿Hay más delitos, además del presunto fraude?
-No cabe duda de que hay un delito medioambiental, y de hecho un estudio del Instituto Tecnológico de Massachusetts advierte de que en Europa se pueden producir un total de 1.200 muertes prematuras derivadas de las emisiones excesivas de estos vehículos Volkswagen. Estamos hablando de 11 millones de motores en el mundo, 8 millones y medio de motores en Europa y casi 700.000 en España con este problema. Y no olvidemos que son Volkswagen, Audi, Seat y Skoda los que están afectados en alguno de sus modelos.
- ¿Cómo han centralizado las demandas en una sola?
-La denuncia afecta a gente en todo el territorio nacional, y el competente en este caso es el juez instructor de la Audiencia Nacional. Para que no haya múltiples procesos se dota al juez de la potestad de investigar él el delito medioambiental, junto con la estafa por publicidad engañosa. Y en ese procedimiento penal, al haber tanta gente afectada, el juez citó hace un año a los abogados personados en el caso para que nos agrupáramos con el fin de simplificar el proceso. Al final somos doce despachos que centralizamos las demandas particulares. En Asturias somos el único despacho en la organización.
- ¿Cuántos afectados hay en Asturias?
-Es una pregunta que no podemos responder, porque es tal el secretismo que no nos dan esa información. La hemos pedido varias veces, porque queremos saber los datos de los afectados y que la Audiencia Nacional comunique a todo el mundo que pueden reclamar.
- ¿Todos los afectados tienen derecho a reclamar y ser indemnizados?
-Por supuesto, igual que pasó con las cláusulas suelo. Pero en España, contrariamente a lo que pasa en Estados Unidos, el Estado en lugar de proteger al consumidor está protegiendo a Volkswagen, imagino que por intereses políticos y económicos, por las plantas de la empresa en España, los puestos de trabajo, la inversión...
- Da la sensación de que el problema se ha ido olvidando.
-Efectivamente, porque a lo que juega Volkswagen en el territorio español es a que con el tiempo, como el coche es un bien que se cambia con cierta frecuencia, la gente acabe optando por el cambio de vehículo y así no tengan nada que reclamar. La marca está mandado a los propietarios que pasen por el taller diciendo que hay un problema con los coches, y la Dirección General de Tráfico, que debería defender a los conductores, está gastando el dinero público en mandar unas cartas para apoyar a una empresa privada, recomendando a la gente que las recibe que vayan al concesionario de forma urgente. En vez de eso, deberían advertir a la gente de que su coche tiene un fraude y pueden reclamar. Pero se le está echando una mano a una empresa privada con dinero público, que debería gastarse en campañas de educación vial. No se está diciendo la verdad, que es que esos coches contaminan excesivamente. En Suiza a estos coches no se les deja circular. Y en España no se les debería dejar pasar la ITV.
- ¿Qué ocurre en las revisiones?
-La pasan sin problemas. No les dan para atrás porque sería un escándalo, estaríamos hablando de casi un millón de personas que no pueden circular con su coche. Y si eso pasa, tendrían que indemnizar. No lo hacen porque el escándalo sería de proporciones mayúsculas. Están intentando que pase el tiempo. Y además, cuando van al concesionario, les quitan el software, que es la prueba del delito, y encima dan un papel a firmar en el que el dueño del coche renuncia a cualquier tipo de reclamación porque supuestamente el coche ya está arreglado. Nosotros les aconsejamos, primero, que no vayan. Y si van, que no firmen. Y lo grave es que la DGT está ayudando a ello, para mí eso es prevaricación.
- ¿Aún hay gente que tiene el vehículo afectado y no lo sabe?
-Muchísima. Una vez que nos hemos asociado por mandato del juez hemos puesto dinero para hacer una campaña de divulgación. Estamos animando a la gente a que se sumen, no cobramos cuotas ni nada, sino que en el caso de que salga bien cobraríamos un 20 por ciento de la indemnización. Nuestra mayor arma es ser muchos; cuando logremos ser 100.000, Volkswagen se va a tener que sentar en el banquillo. Si somos capaces de que haya clamor popular, es cuando podremos hacer más fuerza.
- ¿Tienen esperanzas de éxito?
-En España la justicia funciona. Aquí se condena a políticos y banqueros. Lo importante es que la gente sea consciente de que tiene que reclamar, y que sepan que con este sistema que hemos habilitado no tienen que pagar. En la página web se pueden registrar con sus datos y no es necesario más papeleo ni perder el tiempo.
