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La delicada situación económica municipal

Servicios Sociales urge un ajuste de 2,5 millones para dar dinero a la renta social

Illán vuelve a presentar a la oposición, esta vez en expedientes distintos, una modificación presupuestaria imprescindible para cuadrar las cuentas

Dicho y hecho. La presidenta de la Fundación Municipal de Servicios Sociales, la edil forista Eva Illán, ya le ha presentado a los grupos de la oposición el ajuste presupuestario cuya aprobación considera imprescindible para definir las partidas económicas de la entidad y, al tiempo, dotar de fondos el programa de la renta social de cara a poner en marcha en el verano una nueva convocatoria. Sin esta modificación no habrá renta social clarificaba sólo hace unos días Illán para evidenciar que la decisión estaba en manos de la oposición y no de los ajustes del Plan Económico Financiero que debe asumir Gijón tras el incumplimiento de la regla de gasto.

Lo que Illán incorpora al orden del día de una nueva junta rectora de la Fundación de Servicios Sociales convocada para el lunes es exactamente lo mismo que llevó al último Pleno y le fue rechazado. El único cambio es que en lugar de agrupado en un sólo expediente va dividido en cuatro para intentar facilitar acuerdos. En total son ajustes por una cuantía de unos 2,5 millones. El expediente número 5 son suplementos de crédito por 497.000 euros para gastos de personal. El expediente número 6 suma 60.400 euros para hacer frente al gasto real en primas de seguros (18.800 euros) y servicio postales (41.600 euros). El grueso está en el expediente número 7 con 1.302.200 euros para ayudas de emergencia e integración. La prórroga presupuestaria dotó esta partida con solo 401.000 euros cuando el gasto estimado para el año supera los 1,7 millones. De hecho en los cinco primeros meses ya hay obligaciones comprometidas por 765.918 euros. Y la última modificación, la que se corresponde con el expediente número 8, son 550.000 euros para incorporar dentro de la renta social una línea de ayudas para pagos energéticos. Hasta ahora las ayudas energéticas tenían un dotación singular y específica basada en fondos europeos que ya se han terminado. Todas estas modificaciones se financian a cargo de los 3,5 millones del remanente.

Con todas estas modificaciones, la Fundación Municipal de Servicios Sociales podría volver a llenar la bolsa de dinero que da soporte a la renta social. Una vez garantizados los recursos y aprobadas unas nuevas bases -entre otras cosas para incorporar las ayudas energéticas y para fijar un nuevo sistema de pago de la ayuda anual en dos semestres- se podría hacer la primera convocatoria de 2018 con una dotación de entre 1,6 y dos millones de euros.

El año pasado, y gracias a los remanentes, la renta social comprometió cinco millones de euros. Este año el punto de partida, y sin posibilidad de ampliación, era de 3,2 millones. Pero de ese dinero un millón son pagos de las tarjetas entregadas el año pasado a los beneficiarios y gran parte del resto del dinero, y a través del sistema de bolsa de vinculación, fue usado para dar soportes a ayudas sociales, el servicio de ayuda a domicilio y becas comedor que tenían mayor urgencia Por eso ahora es necesario llenar esa bolsa de vinculación para dotar de recursos la renta social.

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