Lonja Gijón tiene ahora el sello que reconoce que su actividad se enmarca en los límites de la pesca sostenible. Tal y como confirmó ayer el Puerto, la rula de la ciudad acaba de recibir el certificado de la Marine Stewardship Council (MSC), el organismo que acredita los espacios de pesca que no interfieren con el medioambiente.

Con esta distinción, la lonja gijonesa demuestra que su actividad pesquera es sostenible en tres aspectos. Por un lado, porque se desarrolla entre poblaciones de peces cuya continuidad indefinida está asegurada, es decir, que el cupo de pesca permite que las poblaciones de peces continúen siendo productivas.

En segundo lugar, el sello reconoce también la garantía de un impacto medioambiental "mínimo". Esto se traduce en que la pesca, además de vigilar las especies con las que trabaja, debe gestionarse de forma que, durante la captura, quede garantizado que otras especies y hábitats dentro del mismo ecosistema se mantengan sanos. Por último, el certificado de MSC tiene también en cuenta que la rula de la ciudad cumple las normas pertinentes en materia medioambiental y que "es capaz de adaptarse a cualquier variación de sus circunstancias", según el Puerto.

El estándar de la a Marine Stewardship Council está avalado internacionalmente para medir el grado de sostenibilidad y buena gestión de rulas y pescaderías. Sus criterios se revisan y se actualizan periódicamente en colaboración con organismos científicos y del sector pesquero.