El Concurso Hípico Internacional de Gijón, que se celebra anualmente en Las Mestas, acoge a miles de espectadores, pero también supone una oportunidad de empleo temporal veraniego para la última semana de agosto. Un empleo al que aspiran cientos de personas. Este año, en concreto, fueron 762 los hombres y mujeres con interés por ser taquilleros. Para resolver la demanda, en Las Mestas se celebra cada año un sorteo del que sale una primera preselección para este trabajo. Este año para la cita que tendrá lugar del 29 de agosto al 2 de septiembre solo se necesita cubrir 56 plazas. Y ayer era la primera criba
Unas treinta personas asistieron al sorteo público que tuvo lugar en Las Mestas, donde vivieron en directo esa primera selección de 150 candidatos. Y como no podía ser de otra forma, no todos tuvieron la misma suerte. Sebastián Luna no resultó seleccionado, pero comenta que "de las tres veces que participé, fui escogido en dos de ellas", así que ya sabe lo que es trabajar en Las Mestas. Las mismas veces participó Isabel Bulnes, aunque ella solo obtuvo una recompensa.
"Estoy seleccionado, pero ahora hay que pasar el examen", comenta Antonio Gallego, otro gijonés que salía airoso del primer sorteo. Se refería al exámen de aritmética que tendrá lugar el próximo viernes, que determinará quiénes son los 56 afortunados que obtendrán el empleo. Esta prueba se celebrará en el Centro Municipal de El Coto.
"Somos muchos participantes; es muy complicado que te toque", afirma Julia Menéndez, una joven que ha probado por primera vez suerte en el sorteo del Hípico. Lo cierto es que solo un 7% de los participantes de esta edición, tras el examen del día 17, trabajarán durante los cinco días que dura el CSIO. Más afortunada resultó Gema García que, aun siendo su primera participación, ha conseguido pasar la primera fase: "He llegado hace poco de trabajar en el extranjero y ésta es una buena oportunidad para conseguir un empleo temporal", afirma, con una sonrisa, tras la realización de la rifa.
Además de las 59 personas que venderán boletos tras el examen del próximo viernes, habrá un pequeño grupo de interesados que quedará en lista de espera, para incorporarse en caso de que alguno de los seleccionados renuncie a su puesto de manera obligada o voluntaria.
Desde la organización destacan la bajada de solicitantes de esta edición, ya que el año pasado se llegó a los 861 solicitudes y, en ocasiones anteriores, a más del doble. El drástico descenso con respecto a otras convocatorias podría deberse a una suma de factores, incluido el requisito de mayoría de edad como imprescindible para participar en este sorteo, que ya el año pasado mitigó la demanda. Según Enrique Blanco, este tipo de convocatorias suponen "una buena oportunidad para que los jóvenes se inserten en el mercado laboral, aunque solo se trate de unos días de trabajo".
