Es alguien capaz de hacer su autorretato poniéndose bajo la tutela del autor de la "Fenomenología del espíritu". Nada y más y nada menos". "A mí lo que me gusta es debatir y seguir la ley de contradicción de Hegel". Y habla de Spinoza o de Schopenhauer como si fueran pensadores de trato fácil, a los que ha frecuentado cada dos por tres. Sorprende tanta soltura. Y más aún saber que Juan Carlos Sánchez Delgado no es ningún catedrático emérito, uno de esos profesores sin alumnos que se aburren un poco y van por las redacciones de los periódicos a pegar la hebra. Él se define como un filósofo autodidacto que ha encontrado su pasión incandescente en los libros y en la historia del pensamiento. Y la sorpresa es aún mayor cuando cuenta su vida. Fue durante cuarenta años hotelero. Durante un cuarto de siglo dirigió, por ejemplo, el Temple Pradorrey, en Astorga. Y allí colaboró en la promoción del cocido maragato.
Nada, en fin, que le inclinara aún al estudio de las teorías de los presocráticos o a querer entender qué diablos es eso del materialismo dialéctico y las leyes de la historia. "Todo cambió cuando me jubilé y di con un ensayo sobre Michel de Montaigne", explica. Desde entonces no ha dejado de leer, con pertinacia, sobre filosofía y los grandes pensadores. Y en 2102, con 61 años, se le ocurrió fundar una tertulia filosófica -así la denomina- nada menos que en el centro de mayores San Agustín. Esta entidad gijonesa tiene 22.000 asociados que no sólo juegan al parchís y el tute.
"Siento necesidad de contrastar mis opiniones con las de otros socios", cuenta Juan Carlos Sánchez. Una tertulia en la que la mayoría son mujeres y en la que no escasean las titulaciones universitarias. "Ahora bien, somos todos jubilados", subraya. Para ordenar los debates que le encandilan, este amigo de filosofías y controversias argumentadas ha escrito una guía en la que repasa la trayectoria del pensamiento universal. De Oriente a Occidente. Y desde los Vedas a Foucault.
El título es una pregunta: "¿Conocemos la historia de la filosofía y sus mejores reflexiones?". Y es lo que ofrece Juan Carlos Sánchez, junto con un puñado de relatos y una selecta bibliografía, en su curioso manual. Un libro en el que hay también página para trece de los filósofos españoles más destacados de los últimos años: de Trías o Savater, a Escohotado y Lledó.
Tiene en marcha otra tertulia en el Ateneo Jovellanos y mantiene una muy visitada página de debates en Facebook. Acaba de publicar su primer ensayo: "El mito, la filosofía y la religión". Escribe en la primera línea de la contraportada: "Con este ensayo trato de explicar, siguiendo mi escuela filosófica ecléctica, las mejores ideas que han aportado reconocidos autores sobre el tema elegido". La bibliografía apabulla un poco: de Jung a Gustavo Bueno, pasando por Todorov. Lleva su tertulia filosófica con mano de hierro en guante de seda: se puede hablar de todo menos de fútbol. Ahora anda preocupado con la manipulación de las emociones, Trump, los "hackers" rusos... Y avisa de un problema: "La gente común lee poco y ve demasiado la televisión".