Ciudadanos promoverá que el Ayuntamiento solicite "la cesión de uso del salón de actos de la Casa Sindical, así como de otros espacios actualmente en desuso, para que puedan ser utilizados por el conjunto de la ciudadanía" una vez que se complete la rehabilitación del inmueble. Así lo explicaba ayer el edil Rubén Pérez Carcedo tras congratularse de que el Ministerio de Trabajo y el Ayuntamiento "se estén tomando en serio este asunto" pero alertando de que la preocupación sobre este céntrico edificio no puede quedarse sólo en su mal estado. "También nos preocupa su infrautilización, ya que en la actualidad están sin uso casi dos tercios del edificio", sentenció el edil.
Ciudadanos fue el grupo político que hace dos años colocó el futuro de la Sindical en el centro del debate municipal a través de iniciativas en comisión y pleno. El Ministerio de Trabajo, como responsable del patrimonio sindical al que pertenece el edificio, presentó al Ayuntamiento hace unos meses un anteproyecto de reforma por una cuantía de 4,3 millones. El Ayuntamiento le exigió mejoras en elementos de accesibilidad y el rechazo a cualquier actuación, como se planteaba en la documentación, de clausura del total o una parte del salón de actos.
Ajustes que, en comunicación de Trabajo a alguno de los sindicatos que usan el edificio, no hay problema en asumir. El problema ahora es el nuevo escenario de gasto y prioridades que abre la crisis del coronavirus. "Tenemos contactos constantes con el Ministerio y nos habían dicho que todo estaba preparado, que no habría problemas, tampoco con el salón de actos. Incluso se nos explicaron las primeras obras que se iban a hacer pero ahora, con esto del COVID-19 todo está parado. Estamos convencidos de que se arreglará pero también de que todo se va a retrasar", explicaba Nacho Fuster, secretario general de la CSI.
Otro de los inquilinos del edificio es Comisiones Obreras. Al sindicato que lidera en Gijón Víctor Manuel Roza le interesa lo que pase con la rehabilitación integral del edificio -proyecto que nadie les ha mostrado- pero su máximo interés se centra en su realojo en el espacio que hasta hace unos meses ocupara el Servicio de Empleo. Tienen su propio proyecto de reforma de la zona, que está a la espera de los permisos municipales. "En cuanto lo tengamos serían cuatro o cinco meses pero con todo parado como está ahora calculamos que el cambio sea para el año que viene", asegura.
