“Por tu salud, muévete de forma sostenible” es el lema elegido este año por la Comisión Europea para celebrar la Semana Europea de la Movilidad, que se desarrollará desde hoy, 16 de septiembre, hasta el día 22, en diferentes ciudades, entre ellas, Gijón, donde se han programado numerosas actividades para todos los públicos entre las que se incluyen charlas, exposiciones, rutas a pie o marchas ciclistas.

Gente paseando por Gijón. |

La Semana Europea de la Movilidad arrancó en el año 2000 y es una campaña europea dirigida a sensibilizar, tanto a los responsables políticos como a la ciudadanía, sobre las consecuencias negativas, tanto para la salud pública como para el medio ambiente, que tiene el uso irracional del coche en la ciudad, y los beneficios del uso de otras formas de desplazamiento más sostenibles como el transporte público, la bicicleta y los desplazamientos a pie.

Moverse de forma sostenible es bueno para la salud

En consonancia con el eslogan de este año, la Comisión Europea quiere poner en el centro del debate político y social las oportunidades de cambio que surgen de la crisis sanitaria provocada por el coronavirus, vinculando la importancia de crear entornos saludables que favorezcan los modos sostenibles de desplazamiento, con la mejora de la salud individual y colectiva de la población. El eslogan elegido centra la atención en cuatro temas centrales: la salud mental y física, la seguridad y la respuesta a la citada covid-19.

Salud mental.

La iniciativa pone la mira en la relación entre salud mental y movilidad urbana, una cuestión que ha cobrado mayor importancia durante la pandemia. Gracias al transporte público, las personas mayores pueden llevar un estilo de vida activo en su comunidad. Además, los desplazamientos en bicicleta y a pie tienen efectos muy beneficiosos tanto a nivel físico como psicológico. Varios estudios indican que la actividad reduce la depresión, la ansiedad y otros problemas de salud mental. Hacer ejercicio, ya sea caminando o en bicicleta, aumenta el flujo sanguíneo, libera endorfinas y reduce los niveles generales de estrés. Por contra, según la Organización Mundial de la Salud, “el ruido excesivo interfiere en las actividades cotidianas de las personas y puede perturbar el sueño, causar efectos cardiovasculares y psicofisiológicos, reducir el rendimiento y provocar respuestas de molestia y cambios de comportamiento social”. Cada año se pierden más de 1,6 millones de años de vida saludable debido a la contaminación acústica, la segunda mayor carga medioambiental de Europa después de la contaminación atmosférica.

Salud física.

Otro tema prioritario es la salud física y aspectos como los efectos de la contaminación atmosférica y acústica y el beneficio de la movilidad activa. El tema de la seguridad pone de relieve los últimos avances en materia de seguridad del transporte, la integración de las personas con movilidad reducida y las amplias medidas de seguridad vial en el entorno urbano. La respuesta de las administraciones locales a la pandemia también se ha tenido en cuenta, en concreto los aspectos positivos de esta en cuanto a movilidad urbana y la importancia de recuperar la confianza en el transporte público. Se han observado cambios importantes relacionados con la reducción de la contaminación atmosférica, el uso de soluciones de movilidad activa, los nuevos medios de transporte, como las bicicletas eléctricas, y las iniciativas dirigidas a ampliar las zonas peatonales urbanas y los espacios verdes.

Medidas de seguridad.

Este punto profundiza en dos aspectos: la seguridad en el transporte, como las medidas de seguridad para personas con movilidad reducida, y la seguridad vial. Este último contiene medidas para contrarrestar los accidentes de tráfico y las muertes. Alrededor del 15% de las personas de la UE tienen discapacidades, una cifra que se prevé que vaya en aumento. Por ello, la Comisión de Transportes del Parlamento Europeo ha identificado diversas dificultades que afrontan las personas con movilidad reducida, o personas invidentes o con discapacidad visual, a la hora de utilizar el transporte público, y que deben solucionarse. Asimismo, los Estados miembros europeos están avanzando hacia el objetivo de cero víctimas mortales en las carreteras, o “Visión Cero”, El 38 por ciento de los accidentes mortales se producen en vías urbanas. Por lo tanto, el tema anual de esta Semana Europea de la Movilidad para 2021 se propone sensibilizar sobre la trágica cifra de víctimas mortales de 2018, cercana a 9500, siendo más del 50 por ciento de estas de ciclistas o peatones. Hay una clara relación de causalidad entre la velocidad de un coche y la gravedad de las lesiones de un ciclista o un peatón.

Respuesta al covid-19.

En Europa y en el resto del mundo, el coronavirus provocó una reducción considerable del uso del transporte público. La marcada disminución del número de pasajeros se debió en parte a preocupaciones infundadas por el riesgo de contagio del virus en trenes o autobuses. Sin embargo, los datos de las agencias gubernamentales alemanas y francesas para el control de la enfermedad indican que sólo entre el 0,2 por ciento y el 1,2 por ciento de los contagios de covid-19 pueden rastrearse en todos los medios de transporte (terrestre, aéreo y marítimo). Estos resultados están respaldados por un estudio realizado en China mediante la evaluación de grupos relacionados con trenes de alta velocidad. El estudio subraya que el transporte público es muy seguro siempre que se disponga de un espacio adecuado para distribuir a los pasajeros y la exposición sea relativamente corta.