Muere a los 35 años el vecino de Gijón que unió a su barrio para conseguir fondos para tratar su cáncer

Francisco Álvarez, el vecino de La Camocha que había movilizado este año a toda la ciudad en una campaña de recaudación de fondos para tratar su cáncer, falleció finalmente ayer, a los 35 años, víctima de la enfermedad y de una infección reciente de la que no terminó de recuperarse. Su viuda, Sonia Pereira, explica que la "inmensa ayuda" de sus vecinos sí había logrado que el gijonés pudiese acceder al tratamiento que buscaba en Navarra, pero que tras enfermar hace unas semanas tuvo que suspender unas sesiones de quimioterapia que, hasta el mes pasado, les habían hecho recobrar la esperanza. "Él logró empezar el tratamiento y estaba reaccionando bien, se veía que le hacía efecto. Pero ingresó en Cabueñes por una infección, tuvimos que anular los viajes, y ya no volvió a ser el mismo", se lamenta la gijonesa, que agradece a los vecinos la ayuda prestada.

Álvarez fue diagnosticado con un cáncer en las cuerdas vocales hace ahora algo más de dos años. El pasado junio, la única oportunidad que la familia veía factible era un tratamiento privado en una clínica de Pamplona, para el que necesitaban más de 20.000 euros. La petición de ayuda hizo pronto que todo el barrio de La Camocha se volcase en una causa que se extendió a la ciudad y que llamó la atención de celebridades como David Villa. "Estamos muy agradecidos, se hizo todo lo posible", agradece Pereira, que cree que, de no haber sido por esta infección a mitad de tratamiento, Álvarez hubiese tenido posibilidades de recuperarse "gracias al barrio". El gijonés, que deja cuatro hijos, será despedido hoy, a las 17.00 horas, en la iglesia parroquial de Santa Olaya.